El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, encabezó la ceremonia con la que se dio inicio a la construcción de la refinería de Dos Bocas, en el municipio de Paraíso, en el estado de Tabasco.
Se espera que la obra quede concluida en mayo de 2022, con una inversión máxima aproximada de 160 mil millones de pesos.
López Obrador indicó que la construcción de esta refinería, así como las obras de mantenimiento y remodelación de otras 6, es para garantizar la producción de gasolinas.
"No se justifica que en 40 años no se haya construido una nueva refinería en el país. Se decide remodelar las seis refinerías existentes y garantizar la producción de gasolinas y poder ofrecer mejores precios a los consumidores".
Agregó que se eligió Dos Bocas por ser un lugar estratégico y porque llegan 1 100.000 barriles de petróleo diarios que abastecen las seis refinerías del país. Lo que representa un ahorro, dijo.
"Esto es un beneficio para el sureste, es un acto de justicia para Tabasco y esta zona del territorio nacional debido a que han aportado al desarrollo nacional".
Al evento asistieron Manuel Bartlett, director general de la Comisión Federal de Electricidad, Irma Sandoval, titular de la Secretaría de la Función Pública y Octavio Romero, director general de Petróleos Mexicanos; así como Rocío Nahle, Secretaría de Energía y del gobernador de Tabasco, Adán Augusto.
El mandatario mexicano aprovechó para mandar un "memorándum de amistad" al pueblo de Estados Unidos en el que dejó asentado que quiere seguir siendo amigo del presidente Donald Trump.
"Los mexicanos somo amigos del pueblo estadounidense, a ellos me dirijo desde Paraíso, Tabasco. Juremos que nada ni nadie separé nuestra bonita y sagrada amistad", dijo López Obrador.
Sostuvo que el gobierno de México es amigo del gobierno de Estados Unidos y se tienen buenas relaciones con todas las naciones del mundo.
"El presidente de México quiere seguir siendo amigo del presidente Donald Trump", refirió.
Reiteró que actuará de manera prudente en los temas con el vecino del norte, "No queremos exponernos. Hay que actuar de manera precavida cuando se trata de la soberanía nacional".
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, criticó de nueva cuenta las medidas del gobierno de México entorno a la crisis migratoria que se vive en la frontera.
A un día de que la delegación mexicana se reúna en Washington con representantes del gobierno estadounidense, el mandatario dijo que lo que se necesita son acciones, no palabras.
"México está enviando una gran delegación para hablar de la frontera. El problema es que han estado 'hablando' durante 25 años. Queremos acción, no hablar. Podrían resolver la crisis fronteriza en un día si así lo desean. ¡De lo contrario, nuestras empresas y puestos de trabajo regresarán a Estados Unidos!".