La tasa de ocupación en el sector informal registrada en abril es la más alta desde en cinco años, según informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
De acuerdo con el organismo, el 28.1% de la población ocupada durante este mes se encuentra bajo la informalidad, lo que representa un 1% más de lo registrado en marzo, cuando fue de 27.7% y casi un punto por encima de la cifra registrada en el mismo mes del año pasado.
Dicha tasa considera a todas las personas que trabajan para unidades económicas no agropecuarias que operan a partir de los recursos del hogar o de la persona que encabeza la actividad, sin que existan registros contables.
Por otra parte, la Tasa de Informalidad Laboral 1 (TIL1) se ubicó en 56.7% de la población ocupada durante abril de 2019, cifra inferior a la de un mes antes, que fue de 57.1%, y al 56.9% que se registró en el mismo mes de 2018.
Esta tasa hace referencia a la suma de quienes son laboralmente vulnerables por la naturaleza de la unidad económica para la que trabajan, debido a que no es reconocido por su fuente de trabajo. En este grupo se engloba al sector informal así como todos los trabajadores que ejercen labores sin seguridad social y cuyos servicios son utilizados por entidades económicas registradas.
A su vez, la tasa de subocupación representó el 7.4% en abril de este año, dos décimas por encima del 7.2% que hubo en marzo y más de un punto arriba del 6.8% que se registró en abril de 2018.
Las cifras de desempleo
La tasa de desocupación en el país durante el mismo mes fue de 3.5% de la Población Económicamente Activa (PEA), lo que representa un aumento de una décima respecto al mismo mes de 2018, pero una disminución respecto al mes de marzo, cuando llegó a 3.6%.
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Los estados en los que más incrementó la tasa de desempleo respecto al año anterior fueron Chiapas y Jalisco, aunque Tabasco fue el estado que en términos globales tiene mayor tasa de desocupación, al registrar 7.6% de su población. Mientras tanto, las menores tasas se presentaron en Oaxaca, con 1.5%; Guerrero, con 1.6%; Yucatán, con 1.8%; y Michoacán, con 2.0 por ciento.
Dentro del total de la población ocupada, el 68.3% opera como trabajador subordinado y remunerado ocupando una plaza o puesto de trabajo, 22.8% trabaja de manera independiente, 4.6% son patrones o empleadores, y un 4.3% trabaja en negocios o parcelas familiares, contribuyendo de manera directa a los procesos productivos, pero sin un acuerdo de remuneración monetaria.
De toda la población ocupada, 43.1% se concentró en los servicios; 19.4% en el comercio; 16.5% en la industria manufacturera; 11.4% en las actividades agropecuarias; 8.3% en la construcción; y un 0.7% en actividades como la minería, electricidad y suministro de gas.
Estas cifras proporcionadas por el INEGI, considera a la población en edad de trabajar como aquella de 15 en adelante; mientras que el concepto de desocupación hace referencia a quienes no trabajaron al menos una hora durante la semana de referencia en la que se llevó a cabo la encuesta.