En la secta Nxivm, vinculada al tráfico y explotación sexual de mujeres, destacaba la participación de mexicanos como Emiliano Salinas Occelli, hijo del expresidente Carlos Salinas de Gortari, quien trajo a México la operación de la secta creada por ca través del programa Executive Success Programs (ESP), a partir del cual reclutó a empresarios y mujeres para unirse a la organización de "autoayuda".
Salinas ha sido mencionado en los testimonios del juicio llevado a cabo en Nueva York como una de las personas cercanas a Raniere, sin embargo, cuando el escándalo se hizo público, el hijo del expresidente renunció al ESP junto con su socio Alejandro Betancourt, quienes, aseguraban, desconocían de la existencia de un culto de esclavas sexuales.
Además, se contabilizan al menos 100 mexicanos que figuran en las listas de la secta, pero ninguno ha sido indiciado en los juicios y algunos han mencionado que únicamente tomaron un curso con Raniere.
Cabe destacar que Emiliano Salinas no es el único hijo del expresidente ligado a la secta, pues también su hermana, Cecilia Salinas, conocía a Raniere y administraba una escuela llamada Rainbow Cultural Garden, en Monterrey, y la cual pertenecía a la secta.
De acuerdo con el portal del periodista Frank Parlato, quien ha trabajado en el caso, las hermanas Jimena, Carola y Loreta Garza Dávila son otras de las mexicanas que formaban parte de su organización y, de hecho, la primera convenció a seis mujeres de ser esclavas sexuales de Raniere.
La estructura piramidal de Nxivm obligaba a los integrantes a invitar o reclutar a nuevos miembros para ascender de jerarquía y a la secta sólo se podía ingresar por medio recomendación y pagando grandes sumas de dinero.
Entre otras de las personas que figuraban en las listas de la secta están Margarita García de Alba, directora general de la empresa Nopalito'z, con sede en Nuevo León, además de hombres como Víctor Manuel Ochoa Peña, Jesús Santos, Daniel Merino, Diego Asunsolo, Daniel Márquez, Diego Rodelo y Carlos Arturo Galván.
Por otra parte, en las revelaciones hechas por Lauren Salzman, mano derecha de Rainere, en la corte federal mencionó que en el primer círculo de confianza se encontraba la mexicana Rosa Laura Junco de la Vega, hija del principal accionista de Grupo Reforma, quien compró una casa la cual era usada por Nxivm, en Waterford, Míchigan, en celebraciones y rituales para su líder.
Además, Salzman también nombró a Mónica Durán, Daniela Padilla y Camila Fernández como gente cercana al círculo de confianza de Raniere.
De igual forma mencionó la participación de Alejandra González Anaya, hermana de José Antonio González Anaya, exsecretario de Hacienda y Crédito Público (SHCP), de Fabiola Sánchez de la Madrid, esposa de Federico de la Madrid Cordero, así como del hermano de este último, Miguel, quien fue parte de NXIVM y acudió a uno de los cursos que la organización impartía en su sede central en Albany, Nueva York.