A inicios de marzo, algunos cajeros en Guanajuato y Tijuana comenzaron a escupir billetes. En ese entonces se habló de una falla en el sistema de los cajeros, pero en realidad habían sido infectados con un virus informático a partir del cual robaban dinero y clonaban tarjetas bancarias.
En ambas ciudades, personas tenían la instrucción de acudir a los cajeros, pararse enfrente de las máquinas y recoger dinero en cantidades que iban de 30 a 75 mil pesos. Sin embargo, la lluvia de billetes en algunos de los cajeros se debió a que, según la Agencia de Investigación Criminal, quienes debían recoger el efectivo no acudieron a la cita o se equivocaron de sucursal bancaria.
Estos hechos fueron denunciados por el banco BBVA Bancomer, pues argumentaba un fraude electrónico y a partir de eso se derivó una investigación con la cual se identificó al líder y a integrantes de la agrupación civerdelictiva, Bandidos Revolution Team.
Así, la semana pasada, agentes de la Fiscalía General de la República detuvieron a Héctor N. alias Bandido Boss, líder de la banda, la cual, además de ser la presunta responsable del malware en los cajeros, aparentemente también perpetró el ataque al Sistema de Pagos Electrónicos Interbancarios (SPEI) entre abril y mayo del año pasado.
Jorge Ortíz, analista en ciberseguridad destacó en entrevista con El País, el ataque al SPEI, pues "alguien vulneró el sistema a través de algunas instituciones bancarias. Y una vez en las entrañas, tenían acceso al SPEI y le mandaban órdenes: manda dinero a tal cuenta, a tal otra". Es decir, este grupo criminal hacía depósitos a cuentas de terceros quienes hacían los retiros a cambio de una comisión.
En el operativo, la Fiscalía detuvo al jefe de los hackers, además de otros cinco hombres y dos mujeres. Asimismo, las autoridades decomisaron 20 millones de pesos en efectivo, dosis de cocaína, marihuana, metanfetamina, dos armas de fuego y también se encontraron 27 vehículos de lujo, entre los que destacan un Lamborghini Urus, un Aston Martin Vantage y un Ferrari 488.
El informe de la Fiscalía General de la República describe que "los recursos obtenidos de forma ilícita eran destinados para operadores financieros, a través de los cuales adquirían inmuebles y propiedades de alta plusvalía en los principales destinos turísticos de México y el extranjero, además de que el dinero era invertido en paraísos fiscales de Panamá y las Islas Gran Caimán".
De acuerdo con Juan Carlos Carrillo, socio colaborador de IBM México, las principales amenazas para el sector financiero en México son el hackeo a cajeros automáticos, transferencias electrónicas fraudulentas y las fuga de datos de los clientes, las cuales fueron presuntamente aprovechadas por Bandidos Revolution Team.