Ocho de las 22 estaciones que miden las partículas ultrafinas PM2.5 en la Ciudad de México, causantes de la crítica situación de contaminación ambiental que se vivió en la capital la semana pasada, no estaban en operación al menos hasta el 16 de mayo, un día antes de que se suspendiera la contingencia ambiental.
El 36% de las estaciones que son capaces de registrar esos contaminantes se encontraban en mantenimiento, de acuerdo con el diario "Excélsior", incluida la de San Agustín, ubicada en Ecatepec, en el área conurbada y fronteriza con la Ciudad de México, donde se registraron los niveles más altos de contaminantes.
Las otras estaciones que no funcionaron durante la última contingencia ambiental, ocurrida entre el lunes 13 de mayo y el viernes 17 de mayo, estaban diseminadas a lo largo y ancho de la urbe, y fueron las de Ajusco, Benito Juárez, Investigaciones Nucleares, Milpa Alta, Montecillo y UAM Iztapalapa.
Al ser tan diminutas, las PM 2.5 se desplazan con gran facilidad hacia los pulmones cuando los ciudadanos inhalan el aire de la ciudad. Esto provoca efectos nocivos y enfermedades cardíacas y pulmonares. Sin embargo, la jefa de gobierno de la ciudad, Claudia Sheinbaum, confirmó en su momento que no había un protocolo específico para combatir una contingencia ambiental causada por dichas partículas.
Desde el sábado 11 de mayo, la urbe capitalina se vio cubierta por humo y contaminación, causada en parte por los diversos incendios ocurridos en la zona y por las altas temperaturas registradas.
El lunes 13 de mayo, Sheinbaum y el gobierno capitalino decidieron implementar la contingencia ambiental extraordinaria, por las partículas dañinas, y posteriormente activar también la contingencia por ozono, lo que derivó en la limitación a la circulación de automóviles de acuerdo con el organigrama determinado del programa "Hoy No Circula".
La crítica situación obligó a la Secretaría de Educación Pública (SEP) a suspender clases en nivel básico el jueves 16 y viernes 17 de mayo. Lo mismo hicieron las principales universidades de la capital, e incluso la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) decidió ampliar la suspensión también este último fin de semana.
Este lunes, dos días después de que ambas contingencias, la extraordinaria de partículas y la de ozono, fueran desactivadas, la ciudad retomó cierta normalidad.
El programa "Hoy No Circula", obsoleto
El programa "Hoy No Circula" se ha vuelto obsoleto a 30 años de su primera aplicación, señaló el periódico Reforma. En 1989, servía para evitar la circulación de una quinta parte del parque vehicular de la Ciudad de México, pero hoy apenas se aplica para el 6% de los automóviles.
Hace 30 años eran unos 360.000 vehículos detenidos al día de lunes a viernes de 1,8 millones en total. Sin embargo, ahora son unos 258.000 coches de unos 4,1 millones que hay en el padrón, sin contar vehículos con placas de otros estados colindantes con la capital, señaló el diario.
La principal razón de esta caída porcentual, de acuerdo con Reforma, es que prácticamente un 70% de los modelos más recientes pueden obtener hologramas de verificación cero y doble cero, lo cual les permite transitar a diario sin importar si hay contingencia ambiental.
"Es evidente que el 'Hoy No Circula' dejó de ser eficiente", señaló al "Reforma" el subsecretario de la Secretaria de medio ambiente y recursos naturales (Semarnat) Sergio Sánchez.