John Lee Bishop tiene un vínculo muy fuerte con el Cártel Jalisco. El estadounidense era un pastor en su país que ganó gran notoriedad luego de establecer su iglesia "Living Hope" que llegó a congregar alrededor de ocho mil feligreses y se le consideró la séptima iglesia en crecimiento de aquella nación.
Su congregación se estableció en un Kmart de Vancouver, Washington, un suburbio de clase trabajadora que se ubica a orillas del río Columbia en Portland, Oregon. Los vecinos del lugar lo llamaron "la iglesia de Kmart".
La iglesia de Bishop era un lugar donde cabían todos aquellos sectores que habían sido rechazados por el restos de las religiones:adolescentes gay, drogadictos, personas sin hogar, cualquier persona que se sintiera excluida. John Lee aceptó a estas personas porque él venía del mismo lugar como una persona inadaptada y rechazada.
Sin embargo, las acciones de gran caridad de Bishop se vieron manchadas cuando se salió a la luz que la cabeza de "Living Hope" traficaba droga para el Cártel Jalisco Nueva Generación y por lo cual purga una condena de cinco años.
Todo comenzó cuando el hijo del pastor, de nombre David, introdujo a su padre en el bajo mundo de la calle. En 2016 David Bishop ya era traficante de droga y se vio involucrado en una deuda que tuvo que ser saldada por el padre. A partir de ese momento John Lee se ganó el respeto de la organización criminal a tal punto de que le pidieron que presidiera funerales de narcotraficantes.
Meses antes había sido despedido de su propia congregación junto a su familia. Sin dinero y trabajo, Bishop aceptó la propuesta de un amigo taxista para empezar a traficar droga de México a Estados Unidos para el Cártel Jalisco Nueva Generación.
El 11 de diciembre de 2017 cuando el pastor llegó al punto de control fronterizo de Tijuana en un Passat VolksWagen color gris. El agente aduanal lo cuestionó y el predicador contestó que acababa de terminar una misión religiosa y ahora se dirigía a Chula Vista, California.
Los efectivos notaron algo sospechoso, por lo que se acercaron al carro, se agacharon y empezaron a revisar la parte inferior en donde hallaron 105 paquetes bien envueltos de marihuana. También localizaron envolturas de hierba de otras parte del automóvil. Bishop fue arrestado inmediatamente.
Una revisión de los registros de la frontera de Bishop evidenció que cruzó la frontera de Estados Unidos y México en el Passat más de 57 veces entre el 24 de enero de 2017 hasta su arresto en diciembre de ese mismo año. Las autoridades también supieron que había completado el trasiego de heroína mexicana a Vancouver.
Documentos del Tribunal de Distrito de Estados Unidos en San Diego revelaron que Michelle Bishop, su esposa, y su hijo David, de 33 años, estaban involucrados en el tráfico de drogas y que gastaron el diezmo en un crucero y un viaje a un parque de diversiones de Disney.
El obispo se declaró culpable en febrero de 2018 y el 21 de noviembre fue condenado a cinco años de prisión por un cargo federal de narcotráfico. En diciembre apeló su sentencia.