La declaración anual es la obligación fiscal donde las personas físicas informan al Sistema de Administración Tributaria (SAT) los ingresos, deducciones personales, retenciones y pagos provisionales que tuvieron el último año. Cumplir a tiempo ayuda a evitar multas y ser de los primeros en recibir devoluciones de impuestos.
El dinero recaudado de los impuestos permite a los gobiernos federal, estatal y municipal llevar a cabo programas de seguridad, salud, educación y cultura que benefician a la sociedad. El 30 de abril es la fecha límite para presentar el ejercicio del 2018.
¿Quienes deben presentar declaración anual?
De acuerdo con el SAT, deberán presentar la declaración anual los que pertenecen al Régimen de Servicios Profesionales, emiten comprobantes de honorarios, tienen actividades empresariales, cobran rentas, reciben intereses y dividendos, vendieron o compraron inmuebles, obtuvieron préstamos, realizaron donativos o ganaron premios en 2018, siempre que estos excedan los 600,000 pesos mexicanos.
Las personas con un RFC inscrito en algunos de los conceptos anteriores, pero que no hayan tenido ingresos durante todo el año también deberán presentar la declaración donde informen esa situación. Margarita Ríos Farjat, jefa del SAT, dijo que más del 92% de los ejercicios ameritan una devolución de impuestos.
¿Qué se necesita para presentar la declaración anual?
Para hacer la declaración del ejercicio fiscal se requiere el Registro Federal de Contribuyentes (RFC) a 13 dígitos con homoclave, contraseña para ingresar al portal del SAT y CLABE bancaria de 18 dígitos por si el contribuyente resulta con saldo a favor. En caso que la devolución sea mayor a 10,001 pesos, el contribuyente deberá contar con firma electrónica (e.firma).
La información fiscal que se solicita son las percepciones y retenciones mensuales de la persona, los recibos de honorarios y facturas de los gastos, incluidas las que se van a deducir. Todo esto ya está cargado en el portal del SAT si el contribuyente tiene sus declaraciones mensuales al corriente, en caso de no tener su situación al día tendrá que regularizarse primero.
Se recomienda verificar que la información precargada sea correcta. Cualquier queja del ciudadano se realiza ante la Procuraduría de la Defensa del Contribuyente (Prodecon), donde le ofrecen asesoría, representación legal y defensa.
¿Qué se puede deducir?
Es posible deducir impuestos por gastos en honorarios médicos, hospitalarios y funerarios, seguro de gastos médicos, colegiaturas, transporte escolar cuando es obligatorio, abono por créditos hipotecarios, donativos a instituciones autorizadas, aportaciones para el fondo de retiro y depósitos en cuentas personales de ahorro.
Cuando se va a presentar la declaración, el sistema solicita las facturas para comprobar los pagos, las cuales se pueden obtener directamente del portal del SAT.
Los gastos se deducen en caso de haberlos usado para beneficio propio o para su cónyuge o con quien viva en concubinato, así como sus padres e hijos directos.
¿Cómo pagar los impuestos calculados?
Los impuestos se pagan directo en el portal o en ventanillas de los bancos autorizados presentando el acuse de recibo. La institución bancaria le entregará al contribuyente una nota de contribuciones federales con la que podrá comprobar que cumplió con su obligación fiscal.
Los bancos autorizados son Citibanamex, Banorte, HSBC, Banca Mifel, Santander, BBVA Bancomer, Scotiabank, Banco del Bajíio, Banregio, Multiva e Inbursa.
Sanciones por no pagar impuestos
Las declaraciones no presentadas a tiempo ante el SAT cobran una sanción de entre 1,400 a 17,370. Y por incumplir con un aviso del Sistema Tributario castiga a la persona con un pago que va entre los 1,400 a los 34,730 pesos. Los que están inscritos al padrón de importadores y no presenten la obligación fiscal anual serán suspendidos.