El número de militares en las calles en México incrementó en los primeros meses de gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, informó Televisa, citando datos de la Secretaría de Seguridad Nacional (Sedena).
En 2018, el total de tropas desplegadas a lo largo del país fue de 54 mil 980 elementos. Durante los primeros tres meses de 2019, la tendencia fue a la alta: hasta ahora, siete mil 974 soldados han sido desplegados en las calles.
Por lo tanto, el total actual de militares desplegados es de 62 mil 954, un crecimiento del 14,5 por ciento en apenas el primer cuatrimestre de 2019.
De acuerdo con la información de la Sedena citada por la televisora, los nuevos elementos han reforzado 8 de las 12 regiones militares en las que se divide México, pero sobre todo dos de ellas han crecido con respecto al año pasado.
En 2019, el principal despliegue de tropas se ha dado en la décima región, que comprende Yucatán, Campeche y Quintana Roo, en el sureste de México, y la primera zona, que comprende el centro del país, donde se encuentran Ciudad de México, Estado de México, Hidalgo y Morelos.
En la décima zona, el crecimiento de tropas entre el año pasado y los primeros tres meses de 2019 es del 84 por ciento. La zona pasó de contar con 1.467 elementos a estar conformada por 2697: un crecimiento de 1230 militares.
En la primera zona, por su parte, el crecimiento fue del 57 por ciento. El centro del país pasó de tener 4941 elementos del ejército en sus calles a contar con 2816 tropas en total.
De acuerdo con la reforma aprobada en el Congreso mexicano y en los restantes congresos locales, estos elementos del Ejército no tendrán participaron ni injerencia en la Guardia Nacional.
La formación de la Guardia Nacional -que propuso López Obrador- fue aprobada a finales de febrero en el Congreso, tras ser blanco de duras críticas por parte de la oposición y defensores de derechos humanos que consideraron que conducía a una militarización permanente del país.
López Obrador avivó las críticas cuando anunció la semana pasada que la Guardia Nacional tendrá un mando militar activo, ya que en teoría la formación no responderá al Ejército, sino a la Secretaría de Seguridad Pública.
La militarización del país, que buscaba combatir el narcotráfico, generó una ola de violencia que sólo ha crecido desde 2006, cuando el entonces Presidente Felipe Calderón anunció la "guerra contra las drogas".
Ni Enrique Peña Nieto, sucesor de Calderón, ni López Obrador han podido controlar la violencia en el país. El inicio del sexenio de AMLO superó el número de homicidios en los inicios de gobierno tanto de Calderón como de Peña.