El Instituto Nacional de Migración (INM) reinició este lunes la entrega de visas humanitarias a migrantes centroamericanos que se encuentran en el municipio de Mapastepec, en Chiapas.
Esto después de que un grupo de 30 cubanos iniciara una huelga de hambre a las afueras de la estación migratoria siglo XXI el pasado 29 de marzo, en protesta al largo tiempo que el gobierno de México los ha mantenido "varados" en la localidad bajo argumento de realizar el trámite del oficio de salida.
De acuerdo con las autoridades, el procedimiento estará limitado a las personas cuya situación "amerite" recibir la Tarjeta de Visitante por Razones Humanitarias (TVRH), teniendo como prioridad mujeres, menores de edad y personas mayores de 65 años edad.
El reinicio del trámite se da en medio de nuevos roces entre Estados Unidos y el Gobierno mexicano por el tema migratorio.
El presidente Donald Trump amenazó la semana pasada con cerrar la frontera al acusar a México de no hacer nada para frenar la migración ilegal hacia su territorio.
En respuesta, Andrés Manuel López Obrador ha dicho que el tema migratorio se está atendiendo, y que la mejor forma de enfrentarlo es generar oportunidades de empleo en el sur de México y en Centroamérica, de donde provienen la mayoría de los migrantes.
Las autoridades señalaron que el programa de visas permitirá la estancia temporal en México de los integrantes de la caravana centroamericana y del Caribe, conformada por unas 2.500 personas.
Las personas que no obtengan la visa serán enviadas de regreso a sus países. Guatemaltecos, salvadores y hondureños serán trasladados vía terrestre mientras que los provenientes de Cuba, Haití y Nicaragua serán por transporte aéreo.
El programa de visas humanitarias, que benefició a poco más de 13.000 personas, había terminado el 28 de enero pasado. Sin embargo, el arribo de caravanas de migrantes no cesa, por el contrario.
Desde octubre pasado, miles de centroamericanos han cruzado México en multitudinarias caravanas con la esperanza de llegar a Estados Unidos para pedir refugio, alegando que escapan de la violencia y la pobreza en sus países.
En este mismo día, el INM y la Fiscalía General de la República informaron la detención y rescate de cerca de 500 migrantes indocumentados, casi todos centroamericanos, en dos operativos en Chiapas.
El grupo más numeroso, conformado por 181 adultos y 157 menores de edad, viajaba a bordo de cinco autobuses. Iban custodiados por 15 individuos que viajaban a bordo de tres vehículos particulares y que portaban teléfonos celulares, tres radios de comunicación y una computadora portátil, según informó la fiscalía en un comunicado.
En tanto, otros 150 migrantes fueron localizados por agentes del INM mientras caminaban en caravana por una carretera cercana a la ciudad fronteriza de Tapachula.
Los migrantes recibieron atención integral, médica y psicológica para posteriormente ser enviados al INM en Chiapas, según informaron las autoridades.
Los detenidos que transportaban a los migrantes quedaron a disposición del Ministerio Público Federal, que abrió una investigación por su probable responsabilidad en la comisión del delito de violación a la ley de migración.
Agentes consulares de Guatemala interpusieron la semana pasada una queja ante el ombudsman mexicano por la violación de las garantías individuales de sus connacionales, que según dijeron son detenidos ilegalmente por autoridades no competentes.
En lo que va de 2019, el INM ha interceptado a 779 migrantes tan sólo en Tamaulipas. Hace dos días, el gobierno federal informó que en febrero "más de 76.000 migrantes fueron detenidos en Estados Unidos" después de haber cruzado México. Agregaron que en marzo "serán más de 100.000, muchos de los cuales entraron" al país en caravana.
El 23 de marzo, una caravana formada por más de 1.200 migrantes inició una caminata por el sureste de México tras pasar dos meses varados en Chiapas a la espera de que les otorgaran una tarjeta de visitante por razones humanitarias.
Cinco días después se conformó una nueva caravana hacia el norte de México con unos 1.800 migrantes, la gran mayoría cubanos, luego de que el INM cerrará temporalmente sus oficinas en Tapachula y Suchiate.
Con información de EFE