El periodista y académico mexicano Sergio Aguayo, reconocido por su larga trayectoria en diferentes medios de comunicación, venció en los tribunales al ex gobernador mexicano Humberto Moreira, quien lo había demandado hace tres años por daño moral tras la publicación de una columna de opinión.
Un juez de la Ciudad de México absolvió a Aguayo de cualquier delito, debido a que Moreira no pudo probar ninguno de los cargos por los que el político lo acusó cuando presentó su demanda a mediados de 2016. "La vía intentada fue la idónea, pero (Moreira) no acreditó su acción", explicó en su resolución el magistrado Francisco Castillo González.
Moreira, ex gobernador del estado de Coahuila, ubicado en el norte de México, entre 2005 y 2011, demandó a Aguayo para que le pagara una indemnización de 10 millones de pesos después de que el periodista dijera que la carrera del político "olía a corrupción" y que era "un ejemplo de impunidad".
De acuerdo con Aguayo, la demanda fue realizada para intimidarlo y desgastarlo, debido a que el periodista dirigía una investigación sobre la masacre de Allende, una localidad de Coahuila, ocurrida en 2011, durante el gobierno de Moreira, donde el grupo narcotraficante de Los Zetas desapareció a un número indeterminado de personas.
"Las demandas por daño moral deben incluirlas en el listado del arsenal empleado por quienes están empeñados en mantener a México en los primeros lugares de los países más peligrosos para el periodismo independiente", señaló Aguayo en un comunicado.
"La demanda era ilógica porque hubo textos mucho más críticos y porque dejó pasar seis meses para presentarse ante el juzgado", agregó el periodista.
"Los primeros seis meses de litigio fueron una pesadilla. El juez que llevaba el asunto concedía a los abogados de Moreira todas las peticiones, incluidas las más absurdas. Era obvio que fallaría en mi contra", concluyó.
Moreira, además de gobernar Coahuila, fue también presidente nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI, de centro-derecha) durante unos meses de 2011. Antes, había sido alcalde de la capital de dicho estado, Saltillo.
En enero de 2016, el año en que demandó a Aguayo, Moreira había sido arrestado en Madrid por estar acusado de lavado de dinero, organización criminal y malversación de fondos, pero fue liberado un semana después por falta de pruebas. "Han manchado mi honor", declaró al volver a México.
Moreira fue destituido del PRI a mediados de 2017, pero unos meses después el Tribunal Electoral mexicano lo restituyó debido a que encontró deficiencias y fallas en el debido proceso.