En la década de los ochenta y principio de los noventa fue una de las piezas clave en el poderoso Cártel de los Arellano Félix, que controlaba la plaza de Tijuana, en la frontera entre México y Estados Unidos.
Pero luego de ser detenido, en al año 2000, y posteriormente extraditado a EEUU donde en 2008 recibió una sentencia de 40 años de prisión, Jesús el "Chuy" Labra Avilés había desaparecido completamente del mapa. Fue hasta este jueves, cuando su nombre volvió a salir a la luz, luego usuarios en Tijuana grabaran el momento en el que un comandó secuestró a dos de sus hijos, los hermanos Marcos Labra Félix y Jesús Labra Félix.
El "Chuy" Labra nació en la Navidad de 1948, por eso le pusieron Jesús, en Dolores, Chihuahua, parte de su infancia la pasó en Culiacán, Sinaloa y posteriormente se mudo a Tijuana donde conoció a los hermanos Arellano Félix, incluso fue padrino de bautizo de uno de los hijos de Ramón Arellano, asesinado en 2002 en medio del Carnaval de Mazatlán.
"De Tijuana a Culiacán, el señor es respetado", señala uno de los corridos que lleva su nombre, en el que da cuenta de sus hazañas, desde su tierra natal, Chihuahua, hasta Ensenada, en Baja California.
El último caballero
Se le apodaba el "Último Caballero del Narco" por ser un hombre tranquilo, respetado y honrado gracias su influencia en la vida social y económica de Tijuana. Aparentemente no estaba de acuerdo con la violencia, a pesar de trabajar para uno de los más sanguinarios cárteles de México.
En Tijuana era conocido por ser un empresario que compraba propiedades, hoteles y distintos negocios con los que blanqueaba el dinero de los Arellano Félix, incluso, los integrantes del grupo criminal tenían prohibido mencionarlo como uno de los personajes clave del cártel.
Compró un restaurante llamado Boca del Río, para regalárselo a un comandante de la policía de nombre Fausto Soto Miller, según reseña el libro "Historia del Narcotráfico en México", de Guillermo Valdés Castellanos. La comida que se preparaba era la tradicional de la ciudad de Mazatlán, una de las favoritas de los hermanos Arellano Félix.
El 11 de marzo del año 2000, el "Chuy" Labra fue detenido por el Ejército en Tijuana, en la preparatoria federal Lázaro Cárdenas, donde su hijo jugaba fúbol americano.
Durante el operativo, padres de familia que asistían al partido intentaron abogar por él al señalar que era una persona que apoyaba a la comunidad, al deporte y a los jóvenes. Incluso se quejaron por el despliegue excesivo en el centro escolar.
La imagen de su detención en la que aparece hincado en medio del campo de fútbol de la escuela es considerada una de las más famosas en la historia de narco.
Al momento de ser detenido se le encontró un papel en el que tenía escrito el nombre de Elías Verdugo Murillo "El Güero", del llamado "Comando de la Muerte" que en febrero de ese año había ejecutado al jefe de la Policía Municipal de Tijuana, Alfredo de la Torre Márquez.
La Procuraduría General de la República decomisó una serie de propiedades a nombre del narco entre ellas los lujosos ranchos El Chiflido, La estación y El Fénix, en los que se encontraron animales exóticos y muebles que para la época eran considerados como de muy alto valor económico.
El narco estuvo 8 años preso en México, hasta que fue extraditado a Estados Unidos, en 2008, donde se declaró culpable ante una Corte de California de haber formado parte de la organización criminal entre 1980 y 1999. Fue condenado a 40 años en prisión.
Sus abogados fracasaron en un intento para que sólo cumpliera 25 años en prisión. Al terminar su condena, en 2048, tendrá 101 anos de edad.