Cuando se le pregunta a una activista a favor de los derechos de los animales por qué el gato es un animal tan controversial, su respuesta es contundente: "Son animales de primer mundo" y "tienen unas maneras muy 'bonitas' de llamar la atención, realmente es un placer atenderlos".
Con esta respuesta, Érika Muñoz González, de la organización Miztlán la Tierra de los Gatos, dedicada al rescate y esterilización de felinos, señaló a Infobae México que a estos peculiares animales, a diferencias de otras especies, ellos no ruegan por tu cariño sino que tú tienes que hacerlo, y en lugar de pedir, siempre exige.
Su temperamento no ha sido obstáculo para que entre los mexicanos crezca la preferencia por los gatos, y aunque aún no llegan a los mismos niveles de popularidad que los perros, cifras de Purina señalan que la adopción de felinos va en aumento.
Según la empresa, dedicada a la elaboración de alimentos para animales, en el país, de las personas que tienen mascotas, 80 de cada 100 son dueñas de perros y el resto de gatos.
"No existen cifras tan detallados como en el caso del perro, pero sí hemos notado que gracias a campañas de esterilización ha disminuido la población de gatos en la calle y también las adopciones crecen cada vez más", señaló la activista.
Los tiempos modernos juegan a favor del gato, ya que ante la reducción de los espacios para vivienda, la tendencia a no tener hijos y la vida agitada de las personas, lo hacen una mejor compañía que el perro, ya que no demandan tanta atención, no necesitan que un humano los saque a pasear y tampoco necesitan de ellos para hacer sus necesidades fisiológicas.
"El gato se adapta mejor a espacios pequeños gracias a que existen los árboles para gato que pueden ser de muchos pisos y que para el gato, como es trepador, le da la impresión de que está en un lugar más grande", dijo la activista.
En México hay 12 colores gatos. A pesar de la aceptación, aún persisten creencias como las que siempre han aquejado a los de color negro, a los que tradicionalmente se asocia con algún tipo de hechizo.
También persiste el maltrato hacia los felinos callejeros, ya que generalmente no están esterilizados y cuando marcan territorio dejan un olor muy fuerte.
A menudo, después de parir, los dueños abandonan a las crías o a las gatas con todo y la camada.
Por otro lado, la activista señaló que también existe cada vez más aceptación del gato, gracias a su uso terapéutico, principalmente con niños, ya que ayudan a darles mayor seguridad. En los adultos ayudan a evitar problemas de presión gracias al efecto relajante que tienen en sus dueños.