El mexicano operador de montacargas que murió durante el tiroteo en Aurora

Las autoridades del condado de Aurora en Illinois confirmaron que hubo un mexicano entre las víctimas mortales del tiroteo que se registró en una zona industrial el pasado 15 de febrero.

Vicente Juárez perdió la vida a los 56 años. Era asistente de sala de stock y operador de montacargas en Henry Pratt, lugar en donde un hombre comenzó a disparar antes de ser abatido por los policías.

En el sitio web GoFundMe se abrió una página para donar dinero a su familia, con el fin de pagar los gastos funerarios y apoyarlos económicamente en el futuro.

"Estamos solicitando asistencia para cubrir los arreglos funerarios y asistencia futura para su familia. Como muchos de ustedes saben, Vicente era el jefe de su hogar y su familia dependía mucho de él. Sabemos que muchas otras familias también han experimentado una pérdida y apreciamos cualquier ayuda", escribieron en la petición.

En menos de un día recaudaron USD 15.000. Ariana Castro, familiar del hombre, escribió después: "Quiero agradecer a todos quienes tan generosamente han donado hasta ahora. Las palabras no pueden describir el amor y aprecio que sentimos por esta comunidad. El apoyo ha sido tremendo. ¿Gracias!".

Juárez era originario de Ciudad Juárez, Chihuahua, y contaba con la doble nacionalidad. Las autoridades consulares de México se pusieron en contacto con su familia para apoyarlos y repatriar el cuerpo, si así lo requerían.

La jefa del Departamento de Policía de Aurora, Kristen Zuman, confirmó que los otros fallecidos son: Clayton Parks, quien se desempeñaba como gerente de Recursos Humanos de Henry Pratt Company, Russell Beyer, Josh Pinkard y Vicente Juárez.

También perdió la vida Trevor Wehner, un estudiante de Northern Illinois University y quien estaba en su primer día como interno en la compañía. Se iba a graduar en mayo próximo en Gestión de Recursos Humanos.

Cinco oficiales de la policía también resultaron heridos, así como otro empleado de la compañía.

El presunto atacante fue identificado como Gary Martin, quien había sido arrestado en seis ocasiones, una de ellas por violencia doméstica, y en 1995 fue condenado por un delito de agresión con agravante.

Portaba una pistola Smith & Wesson de forma ilegal. Martin había salido de una reunión donde le habían informado sobre su despido. 

John Probst, un empleado de la fábrica, dijo a la cadena ABC Chicago que vio a un compañero de trabajo cargando una pistola con una mira láser y escuchó varios disparos antes de salir corriendo por la parte trasera del edificio. "Uno de los muchachos estaba en la oficina dijo que esta persona estaba disparando, y vino corriendo con bastante sangre", afirmó.