Una bebé de un año y medio de edad murió la mañana de ayer al interior de la estancia infantil Colorines en el Municipio de Sombrerete, Zacatecas luego de que fue dejada para su cuidado y posteriormente trasladada al hospital debido a complicaciones mostradas.
De acuerdo a los primeros reportes que se emitieron, la niña de aproximadamente un año y medio de edad llegó este viernes a la estancia enferma y con medicamento, pero al ver que su estado de salud empeoraba, el personal del lugar llevó a la menor al hospital; pero al ser revisada por los médicos, ya había muerto.
En las primeras versiones se señaló a la estancia por una posible descuido o accidente, sin embargo este sábado la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJE) informó la verdadera causa de muerte de la pequeña.
Fue al mediodía que a través de un comunicado, la FGJE dio a conocer los resultados de la necropsia de ley que se le efectuó a la menor que había fallecido el viernes 15 de febrero en la guardería antes mencionada.
Así, mediante la autopsia los médicos legistas determinaron que la menor falleció debido a una neumonía lobar bilateral y adenitis mesentérica; es decir, una infección respiratoria; además se descartó que el cuerpo de la menor tuviera algún signo o lesión que determinara que hubiera sufrido alguna agresión.
De acuerdo con la información que proporcionó la madre de la menor, así como sus familiares, respecto a la condición de salud que presentaba la menor ahora fallecida, no se percibe que el personal de la estancia infantil tenga alguna responsabilidad en los hechos.
Además, la FGJE informó que la guardería apoya a la familia en los gastos tras lo que esta situación ha generado. Asimismo, precisó que la menor fue entregada a su abuelo paterno.
Recorte a guarderías abre debate sobre el entorno familiar
El recorte presupuestario de 50 % a las estancias infantiles planteado por el Gobierno de México ha generado polémica en el país y parte del debate se centra en qué tan idóneo es el entorno familiar para el desarrollo integral de los niños y niñas.
La propuesta surge como una reacción ante los casos de corrupción detectados en algunas guarderías y consiste, en palabras del presidente Andrés Manuel López Obrador, en dar a los padres la ayuda económica directa a las familias de 1,600 pesos por niño y arrebatar el control del dinero a los distintos centros que podrían estar desviando los recursos obtenidos de los subsidios.
De inmediato, múltiples organizaciones de la sociedad civil se han manifestado en distintos puntos de la capital mexicana y el resto del país contra el recorte de más de 2,000 millones de pesos.
Sus argumentos apuntan a que se perpetúa un modelo que relega a la mujer al cuidado de los hijos y a la peligrosidad de la violencia y disfunciones que en ocasiones pueden emerger de lo más profundo de las relaciones familiares, llegando a afectar a los niños.
La investigadora Christian Aurora Mendoza, del Instituto de Liderazgo de Simone de Beauvoir, una de las entidades que se ha manifestado contra la iniciativa, dijo que no puede tomarse una decisión de este tipo "dando por hecho que existe una armonía en el hogar".
"No podemos olvidar de que hay hogares donde se ejerce la violencia, no solo para las mujeres sino para los niños", argumentó.
Mendoza remite a algunos estudios que sostienen que "hay evidencia de que no todos los hogares son los mejores para cuidar a los niños y a las niñas".
En cambio, para la especialista, las estancias infantiles favorecen a los menores en aspectos como la educación, los valores éticos y el desarrollo psicomotriz.
Siguiendo esta línea, la Comisión Nacional de Derechos Humanos emitió el martes un comunicado en el que expresaba su preocupación por el impacto que puede generar el recorte al Programa de Estancias Infantiles para
Apoyar a Madres Trabajadoras y Padres Solos.
"Podría restringir su derecho a la educación y estimulación temprana, a vivir en condiciones de bienestar, y a un sano desarrollo integral", advirtió.
Señaló que el recorte anunciado "puede propiciar que las madres y padres afectados busquen otras opciones para el cuidado de sus hijas e hijos durante su jornada laboral, derivando en un gasto familiar imprevisto que impacte en sus medios de subsistencia".
O bien, añadió, "es probable que las madres y padres trabajadores se vean forzados a dejar a sus hijas e hijos al cuidado de personas sin preparación para el desempeño de esa labor, lo cual constituye un riesgo para su integridad y seguridad".
Por su parte, el psicólogo Ricardo Trujillo, de la Universidad Nacional Autónoma de México, dijo que hoy día ya no se puede afirmar con rotundidad cuál es el entorno adecuado para un niño, ya que eso obedece a esquemas obsoletos, absolutistas.
Lejos de obtenerse una homogeneidad, si se hace una radiografía al panorama familiar del país se encuentran 63 tipos de familias, asegura el experto. Y cada una es un mundo; cada niño, un caso distinto. "Cada uno va a formar vínculos e interrelaciones diferentes", apuntó.
Por tanto, la elección del espacio es cada vez más personal en función de las necesidades y cualidades del niño.
No obstante, concuerda con Mendoza en que hay "hogares tóxicos", contraproducentes para la infancia en los que existe violencia, implícita y explícita.
Pero el psicólogo también se muestra crítico con las guarderías alegando que "muchos de estos centros subrogados no tienen preparación", en referencia a los trabajadores.
"Puedes encontrar mucho cariño y amor pero el nivel de preparación es nulo", asevera, basándose en algunos casos que conoce de primera mano.
De acuerdo con cifras del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de
Desarrollo Social, 94 % de los usuarios de la estancias infantiles valoran positivamente el servicio.
Ante el recorte, Mendoza exige al Gobierno que explique qué va a hacer con el dinero que ahorre al cortar la fuente de la supuesta corrupción en las estancias. "¿Cómo se van a reinvertir esos ahorros para poder mejorar la calidad de estas estancias?", cuestiona.
Con información de EFE