La Policía Federal de México rescató a 37 migrantes centroamericanos en la ciudad de Reynosa, en el estado de Tamaulipas. Así lo informó este lunes la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC).
En un comunicado de prensa, la secretaría informó que los migrantes, todos hondureños y guatemaltecos, habían sido privados ilegalmente de su libertad.
Su rescate fue posible luego de que policías federales que se encontraban haciendo labores de prevención y disuasión del delito en la demarcación, fueran requeridos por agentes de la Procuraduría General de Justicia (PGJ) de la entidad.
Los elementos de la PGJ solitaron refuerzos en el fraccionamiento Hacienda las Bugambilias, donde presuntamente se encontraban varias personas retenidas.
Tras implementar un cerco de seguridad en los alrededores del inmueble fueron rescatados 28 hondureños y 9 guatemaltecos, de los cuales 18 eran hombres, 10 menores de edad y 9 mujeres. En el operativo también fue detenido el hombre que, presuntamente, los mantenía en cautiverio.
Tras su liberación, los migrantes fueron trasladados al Instituto Nacional de Migración (INM) para recibir asistencia consular. De acuerdo con las autoridades, luego de su identificación se les otorgará el retorno asistido. En tanto, la persona detenida fue puesta a disposición del Agente del Ministerio Público, quien determinará su probable participación en el delito de trata.
En diciembre de 2018 las autoridades rescataron en Monterrey a 94 migrantes centroamericanos luego de haber recibido una llamada anónima desde Estados Unidos. En el operativo de búsqueda hallaron a 85 adultos y 9 niños en un hotel de esta ciudad del norte. En ese entonces, las autoridades dieron aviso al Instituto Nacional de Migración y trasladaron a los migrantes a sus instalaciones para brindarles atención médica.
El 22 de agosto de 2010 en San Fernando, Tamaulipas, 72 migrantes fueron asesinados por miembros del crimen organizado, presuntamente del Cártel de los Zetas,con la aparente complicidad de policías locales.
Los estados de Veracruz y Tamaulipas han sido escenario de numerosos crímenes contra indocumentados y son dos de las entidades que los migrantes deben cruzar en su ruta para Estados Unidos.
Miles de indocumentados cruzan cada año el territorio mexicano; durante la travesía están expuestos a robos, extorsiones, secuestros e incluso asesinatos por parte de bandas criminales, así como a abusos de las autoridades.
En los últimos meses han llegado al país distintas caravanas, conformadas por miles de personas que viajan en grupo para hacer frente a la inseguridad. Desde los últimos meses de 2018, han entrado a México unos 11.500 migrantes centroamericanos, principalmente de los países de Guatemala, El Salvador y de Honduras, y en estos días más de 10.000 han solicitado ingresar de manera regular a través de una tarjeta de visitante por razones humanitarias.