Un hombre camina apresuradamente, carga sobre sus hombros algo que parece un bulto. El peso lo obliga a perder la vertical, a tambalearse mientras acelera el paso.
De pronto, cambia un poco la ruta, se pierde entre árboles y matorrales: las autoridades afirman que el bulto es la maleta donde iba el cuerpo de Ingrid Alison, la joven de 14 años que apareció muerta el pasado martes por la mañana en la Ciudad de México.
La maleta apareció en una jardinera de las áreas comunidad de la Unidad Habitacional Nonoalco, en Tlatelolco. En su interior estaba el cuerpo de la joven que murió de un disparo en el rostro, según informaron horas después las autoridades de la capital.
El portal de noticias La Silla Rota difundió un video grabado por cámaras de seguridad, en el que aparece un hombre que presuntamente abandonó el cuerpo de la joven.
También han difundido una foto con la imagen de un automóvil Chevy color negro con franjas blancas, en el que huyó la persona que dejó a Ingrid muerta y abandonada.
Estas pistas han acercado a las autoridades a los presuntos responsables del asesinato de Ingrid: el hombre de las imágenes, todavía no identificado, y una joven de 22 años, de nombre Melissa, quien al parecer era la pareja sentimental de la joven asesinada y la última que la vio con vida. Los dos están prófugos.
Ingrid fue reportada como desaparecida el lunes 13 de noviembre en la madrugada, después de que familia no tuvo noticias de ella pasadas las 11 de la noche.
Unas horas antes había salido de su casa acompañada de su media hermana Jennifer, de 23 años, con el pretexto fue que iban a entregar un comedor. Pero en realidad Ingrid iba a encontrarse con Melissa.
La hermana mayor dejó a Ingrid en el edificio Ignacio Allende, en donde vive Melissa. Después Jennifer regresó a recogerla, pero sólo vio a Melissa, quien le dijo que habían tenido una discusión y que Ingrid había salido corriendo del edificio.
Al día siguiente, el martes, alrededor de las 9 de la mañana encontraron el cuerpo de Ingrid, muy cerca de la casa de Melissa, donde peritos de Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México llevaron a cabo un cateo. Para entonces, Melissa ya había huido.
En el departamento los investigadores encontraron manchas de sangre en las cobijas y paredes, por lo que lo las autoridades presumen alguna responsabilidad de Melissa en el crimen.
El jefe de Gobierno de la Ciudad de México, José Ramón Amieva, declaró que había avances en la investigación y que la relación sentimental podría ser el móvil del crimen.
Además, testigos declararon que la noche del lunes escucharon gritos provenientes del departamento. Las autoridades también hallaron evidencia que involucra a Melissa con la venta de drogas en la colonia Santa María la Ribera.
Las autoridades han desplegado un operativo de búsqueda para hallar a los presuntos responsables del crimen.
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