Frente al inminente arribo de una caravana de migrantes hondureños que viaja desde su país hacia Estados Unidos, el gobierno mexicano envió a 244 policías federales para blindar la frontera sur.
Además, en un intento por desalentar el paso de los migrantes por México, autoridades mexicanas se reunieron con representantes de la caravana en Guatemala para advertirles que serán deportados quienes ingresen al país sin visa.
La caravana de migrantes hondureños ha colocado a México en un predicamento, pues el gobierno de Enrique Peña Nieto enfrenta la presión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump para detener su paso.
Este jueves Trump advirtió que recurrirá al Ejército de su país para el cierre de la frontera común si México permite el paso de los migrantes hondureños y envió a su secretario de Estado, Mike Pompeo, a reunirse con Peña Nieto este viernes para tratar el tema "de manera prominente", según una fuente de la Casa Blanca, citada por la prensa de Estados Unidos.
México, mientras tanto, hace esfuerzos por contener el paso de los hondureños sin visa que buscan llegar la frontera con Estados Unidos para solicitar asilo.
Para eso, este miércoles autoridades mexicanas del Instituto Nacional de Migración (INM) se reunieron en Guatemala con integrantes de la caravana, a quienes les advirtieron de los riesgos que implica ingresar de manera irregular al país y les anticiparon la deportación.
"Se informó a los migrantes de los graves riesgos que plantea el ingreso irregular al país, particularmente por la presencia de redes de trata y tráfico de personas", informó la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) en un comunicado.
También les advirtió que no hay visa de tránsito y que "aplicará los procedimientos administrativos que permitan el retorno seguro y ordenado a su país de origen de los migrantes que ingresen de manera irregular al país". Es decir, los deportará.
El gobierno mexicano además envió a un grupo de 244 policías federales que arribaron a tres puntos de la frontera sur con la instrucción de contener una posible entrada masiva.
"Tenemos personal que no viene armado, desde su origen, desde la Ciudad de México, y están única y exclusivamente en funciones de contención", aseguró Manelich Castilla, comisionado general de Policía Federal.
"Somos como un dique, y de ninguna manera estamos para reprimir, estamos para auxiliar una migración regular ordenada", dijo ante la exigencia de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos de respetar el paso de los migrantes.
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