"Los Emes": la banda secuestradora de migrantes en México que resurgió bajo el mando de una mujer

Entre 2015 y 2016, el secuestro de migrantes en el estado fronterizo de Baja California se redujo sustancialmente. Las autoridades lo atribuyeron a la captura de Mariano Maldonado Mejía, "El M1", y dos de los principales operadores de una banda llamada "Los Emes".

Sin embargo, en 2017, se notó un repunte en este delito, principalmente en la ciudad de Mexicali, uno de los puntos fronterizos más importantes.

"Los Emes" se habían reagrupado, pero ahora con una mujer al mando: Sara Maldonado Mejía, la hermana de Mariano, quien con sus hijos y viejos aliados del M1 resucitó y fortaleció a la banda.

"Reestructuró las operaciones del secuestro de migrantes y modernizó su modo de operación, a través de un sistema definido y exprés, disfrazado de inmobiliarias y documentos falsos para limpiar su rastro. Existen más células dedicadas al secuestro de migrantes, pero la de los Maldonado es prioritaria por su alto nivel de actividad", dijo al semanario Zeta de Tijuana, un investigador cercano al caso.

La banda es originaria del estado de Hidalgo, según Zeta, donde Mariano y su hermano Lucio, utilizaron sus redes para rescatar al segundo de la cárcel, una vez que cumplieron su objetivo se trasladaron a Baja California desde donde extendieron sus operaciones a los estados de México, Puebla y Ciudad de México.

Desde EEUU contactaban a interesados en cruzar familiares por la frontera de manera ilegal. Si había trato, sus cómplices en el centro del país enganchaban a las personas, las trasladaban a Tijuana y luego a Mexicali, donde les prometían que era más fácil pasarlos al otro lado.

No obstante, en Mexicali los secuestraban en casas rentadas, los golpeaban, abusaban sexualmente de las mujeres y pedían rescate a sus familiares en EEUU. Así funcionaron hasta 2015 cuando un grupo de migrantes logró someterlos y librar una batalla que terminó con el arresto de tres integrantes de la banda, uno de ellos menor de edad.

Sara al mando

Según avances en las investigaciones en proceso a las que Zeta tuvo acceso, en 2017 la Fiscalía local detectó que Sara Maldonado Mejía, había reiniciado los secuestros de migrantes, en complicidad con su hijo Salvador Alcázar Maldonado "El Chava".

Sara ha logrado modernizar la operación de la banda para poder obtener hasta USD 20.000 en dos o tres días gracias a negociaciones de hasta dos víctimas a la vez.

Las declaraciones de las víctimas y cómplices han lograron establecer el nuevo modus operandi de "Los Emes": ya no golpean ni torturan a los migrantes, el periodo de secuestro es más corto y dura un máximo de tres días y están dispuestos a aceptar cantidades inferiores de dinero.

Algunos llegan al viejo estilo, los recogen en el centro del país y los llevan a la frontera, pero otros llegan directamente a Mexicali donde se les pide que se hospeden en un hotel de la zona centro, ahí los recogen y los trasladan a una casa rentada en zonas residenciales, con puertas eléctricas y sin vista al exterior.

La renta de la casa la hacen sólo por uno dos meses y se registran con documentación apócrifa para garantizar que el propietario nunca tenga contacto con el inquilino.

La organización civil Ángeles de la Frontera, estima que en promedio los secuestradores obtienen USD 5.000 por migrante y obtendrían por semana entre USD 50.000 y 70.000.

La mayoría de los migrantes no denuncian por miedo a ser objeto de represalia, asustados regresan a sus países o ciudades de origen o persisten en su intento por cruzar.

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