Los ciudadanos culpan a la Marina por la desaparición de un joven
Elementos de la Marina mexicana tuvieron que disparar al aire para tratar de disolver una multitud que se había ido en su contra, pero lejos de terminar con el acto de protesta fueron agredidos por un centenar de personas que también destruyó los vehículos en los que se transportaban.
Los hechos ocurrieron el lunes por la tarde en Ciudad Guzmán, Jalisco, durante una manifestación para exigir la salida de la Marina así como la aparición del joven Ulises Adair Cardona de, de 17 años, de la que se culpa a la Armada.
En algunas de las camionetas que fueron dañadas, los manifestación pintaron las siglas del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Las personas se reunieron en la salida de Ciudad Guzmán para marchar hacia el Centro Histórico. Mientras caminaban por la carretera se encontraron con tres camionetas de la Marina, les cerraron el paso y rodearon las unidades.
"Personal naval circulaba a bordo de vehículos oficiales por una avenida de dicha ciudad. El personal naval actuó de manera disuasiva, con base en el Manual del Uso de la Fuerza de Aplicación Común de las tres Fuerzas Armadas, con el fin de disminuir el nivel de la agresión y reducir el peligro de bajas de civiles y de personal naval, por lo que al ver que su vida se encontraba en peligro efectuaron disparos disuasivos al aire para dispersar a la multitud y evitar se generara un altercado, que pudo haber resultado en consecuencias de otra naturaleza", señaló el Ministerio de Marina en un comunicado.
Un video muestra como los manifestantes persiguieron a los marinos, e incluso los agredieron físicamente y les aventaron objetos.
"En apego a la doctrina y valores navales, (la Marina) no repelió las agresiones físicas y verbales sufridas por los manifestantes, inclusive cuando fueron agredidos de manera directa, mientras trasladaban a un elemento naval que por la naturaleza de sus heridas, requería primeros auxilios de manera inmediata", aseguró la institución.
En noviembre de 2017, la Marina instaló un campamento en la zona sur de Jalisco, donde se ubica Ciudad Guzmán, región en la que se presume que se oculta el líder de CJNG, Nemesio Oseguera Cervantes "El Mencho", uno de los capos más buscados de México.
El saldo del enfrentamiento es de al menos dos lesionados, uno de cada bando.
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