Los nachos son un snack popular alrededor del mundo, por lo que no es novedad que restaurantes, cafeterías y hasta las dulcerías de cines y centros de espectáculos los incluyan dentro de su carta.
Esta popularidad ha dado origen a diversas versiones de la receta, las cuales agregan condimentos u otros ingredientes dependiendo de la región en donde se preparen, además de que muchas eliminan el picante. Sin embargo, la constante siguen siendo el queso y la tortilla frita en trozos, también conocidos como totopos.
Una de las recetas más famosas de los nachos es la versión clásica estadounidense, la cual consta de totopos y queso tipo americano derretido; así como la versión del estado de Texas que agrega su tradicional chilli con carne.
Esta fama ha favorecido la creencia de que se trata de un platillo estadounidense, aunque su principal ingrediente: la tortilla y el chile, son dos alimentos distintivos de la comida mexicana.
¿Cuál es el origen de los Nachos?
Pese a la popularidad fomentada por la cocina Tex-Mex, los nachos son un platillo de mexicano, el cual fue creado por Ignacio Anaya un cocinero de Coahuila, quien creó el plato en 1943 en la ciudad de Piedras Negras.
Según la tradición oral de dicha ciudad, el platillo fue producto del ingenio de Nacho -sobrenombre utilizado comúnmente para a quienes se llaman Ignacio- quien trabajaba en un restaurante local y lo creó como forma de salir de un apuro.
El establecimiento, que normalmente atendía al público local, recibió la visita de un grupo de mujeres esposas de soldados estadounidenses que residían en la base aérea de Fort Duncan, quienes solicitaron algo para comer como aperitivo.
Esta petición puso en apuros al restaurante, pues en ese momento contaban con pocos insumos en la cocina. Fue entonces que Nacho decidió tomar unos totopos de maíz, mezclarlos con queso y jalapeños en rodajas, para luego meterlos al horno.
El plato se sirvió a las comensales y tuvo gran aceptación, pues pidieron saber cuál era el nombre del delicioso platillo. Ante la sorpresiva pregunta, Nacho respondió: “Nachos’ special”, que en español significa “el especial de Nacho”.
La fama de esta creación culinaria no tardó en extenderse entre visitantes estadounidenses y público local, con el paso del tiempo y ante la mezcla de idiomas (español e inglés) el nombre del platillo se redujo a “Nachos”, como se le conoce hasta el día de hoy.
La sencilla pero ingeniosa combinación de Ignacio Anaya marcó el comienzo de lo que hoy es un plato internacional, consumido y adaptado globalmente en diversas culturas culinarias.
Receta original de Nachos
Si deseas preparar la receta tradicional de Nachos, aquí te dejamos las instrucciones.
Ingredientes:
- 200 gr. de Totopos de maíz
- Queso rallado que funda bien (puede ser cheddar, mozzarella u otro de tu preferencia)
- 1 chile jalapeño fresco, en rodajas.
Instrucciones:
- Precalienta el horno a 180°C.
- En una bandeja para horno extiende una capa de totopos.
- Cubre los totopos con una cantidad generosa de queso rallado.
- Pon algunas rodajas sobre la capa de queso.
- Hornea los nachos en el horno precalentado hasta que el queso se haya fundido y esté ligeramente dorado, aproximadamente de 5 a 7 minutos.
- Retira del horno y sirve inmediatamente, si lo deseas puedes agregar un poco más de chile jalapeño.
Esta sencilla receta es el complemento perfecto para cualquier reunión con familia o amigos, incluso para disfrutar solo.
La historia de los nachos es un ejemplo de creatividad, así como del impacto cultural que puede tener la gastronomía mexicana.