El corrupto empresario Carlos José Mattos debió volver a los estrados judiciales luego de los diferentes retrocesos que han tenido los procesos judiciales en su contra. Se cayeron los preacuerdos y las condenas fueron anuladas porque no se había establecido el enriquecimiento ilícito. Así como se repite el proceso, se repiten sus quebrantos de salud.
Luego de ratificar la sentencia el pasado 9 de noviembre por el caso de soborno a la juez Ligia del Carmen Hernández, se esperaba que asistiera a la lectura de fallo del segundo proceso por soborno que involucró al juez civil Reinaldo Huertas, pero tuvo que aplazarse.
Mattos permanece en la enfermería de la cárcel El Bosque de Barranquilla por enfermedad, según reveló la W Radio, lo que llevó a que el juzgado 30 Penal del Circuito de Bogotá, que debía leer la sentencia este jueves, aplazara la audiencia para el próximo 15 de noviembre.
El empresario cayó enfermó justo al día siguiente de recibir la ratificación de la primera condena en su contra. El pasado 9 de noviembre regresó ante un juez penal del circuito de Bogotá por el caso de soborno a la juez civil Ligia del Carmen Hernández, a quien le entregó 100 millones de pesos, según estableció la Fiscalía, que le hizo llegar en una caja de zapatos para que reafirmara una decisión que favorecía a su empresa y le permitía comercializar en Colombia los vehículos de la multinacional coreana Hyundai.
Por ese hecho fue condenado en primera instancia en junio, luego de haber alcanzado un preacuerdo con la Fiscalía que incluyó la aceptación de cargos y el pago de una millonaria de indemnización a las víctimas del proceso. Pero el preacuerdo se cayó y la condena fue anulada por no haberse profundizado en el delito de enriquecimiento ilícito.
“Este nuevo fallo es respuesta a una decisión del Tribunal Superior de Bogotá que, luego de revisar la condena inicial contra Mattos Barrero, ordenó realizar las verificaciones necesarias para establecer si el procesado obtuvo un incremento patrimonial injustificado producto de las determinaciones judiciales que lo favorecieron”, explicó el ente acusador.
Sin embargo, luego de revisar los informes contables y otros documentos, la Fiscalía determinó que no había pruebas sobre enriquecimiento ilícito por parte de Mattos en los hechos investigados. Por esa razón, fue condenado únicamente por el delito de cohecho por dar u ofrecer (soborno), que le representó una pena de 5 años, 10 meses y 27 días que deberá cumplir en prisión.
Este jueves debía recibir su segunda condena, por el mismo delito, pero cometido con otro funcionario: el Sexto Civil del Circuito de Bogotá, Reinaldo Huertas, a quien Mattos le habría entregado hasta 700 millones de pesos y fue el primero en favorecerlo con las medidas cautelares.
La Fiscalía había demostrado que en 2015 ”Mattos Barrero pagó dádivas a varios funcionarios del Centro de Servicios Administrativos de los Juzgados Civiles, Laborales y de Familia de Bogotá, con el propósito de que alteraran el sistema de reparto y direccionaran a un despacho específico una demanda que había interpuesto en representación de su empresa automotriz”.
La W Radio también conoció que la defensa de Mattos apelara las sentencias por el preacuerdo que había firmado inicialmente con la Fiscalía que llevaron a su aceptación de cargos. En ese caso, la condenas serán revisadas por el Tribunal Superior de Bogotá que deberá emitir su decisión en segunda instancia respecto al proceso.
La Fiscalía General de la Nación ordenó devolverle casi 2.000 millones de pesos a Carlos Mattos, el empresario condenado por corrupción. El exrepresentante legal de Hyundai recibirá el dinero de la indemnización que había consignado durante el preacuerdo, el cual fue retirado por el ente acusador.
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