El estudio de inseguridad alimentaria infantil realizado por la Asociación de Bancos de Alimentos de Colombia (Ábaco) y la Cámara de Alimentos de la Asociación Nacional de Industriales (Andi) reveló que en Colombia el 54,2 % los hogares colombianos padecen de seguridad alimentaria, es decir, 21 millones de colombianos no pueden conseguir tres comidas básicas al día, además, dejó en evidencia que más de 560 mil niños menores de 5 años tienen desnutrición crónica.
Recordemos, como lo señaló la Universidad del Rosario que esta condición sistémica no solo perjudica el buen funcionamiento del organismo, sino que produce un deterioro en el desarrollo, el cual “Genera trastornos del crecimiento, retrasos motores y cognitivos, una menor inmunocompetencia y un aumento de la morbimortalidad”.
En el análisis que tuvo en cuenta diferentes variantes y datos oficiales, se concluye que en los hogares en lo que se padece de esta enfermedad existen algunos factores en común como: la madre ejerce como cabeza de hogar, son pertenecientes a comunidades afrodescendientes o indígenas, con una mínima participación en la escolaridad, residen en el campo colombiano, tienen el índice económico más bajo de riqueza y están compuestos por al menos siete integrantes. Sumado a esto, los expertos comentaron que la desnutrición es una situación en la que se perpetúa la pobreza.
Por otro lado, en el estudio se señaló que 12 departamentos presentan inseguridad alimentaria en el hogar superior al 60 % y algunos de estos son: Chocó (76,8%), Sucre (73,9%), Vichada (70,1%), La Guajira (69,3%) y Putumayo (68,7%). En este mismo sentido, se pudo determinar que aproximadamente 5 de cada 10 colombianos sufren de inseguridad alimentaria mientras al año en el país se desperdician millones de toneladas de alimentos.
En el 2021 se presentó un informe en el que el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) aseguró que los colombianos no son conscientes de la comida que desperdician y se niegan a esa realidad. Al igual que ocurre en otras partes del mundo, en este país decimos que no desperdiciamos comida por vergüenza o por considerarlo éticamente incorrecto, pero lo hacemos en la práctica, e incluso nos justificamos cuando ocurre”, explicó Camila Cammaert, coordinadora de Sistemas Alimentarios Sostenibles de WWF Colombia a El Espectador.
Lo ciento es que, de acuerdo con cifras suministradas por Juan Carlos Buitrago, director ejecutivo del Banco de Alimentos a RCN Radio, con los alimentos que se botan en un año en el país se alimentarían ocho millones de ciudadanos. Además, podrían comer las tres raciones alimentarias la población de Panamá, Uruguay y Luxemburgo, durante un año.
“Con los alimentos que desperdiciamos en Colombia podríamos darle de comer a ocho Guajiras completas durante todo un año. Si todos los lácteos se pasarán a botellas de leche de un litro podríamos decir que arrojamos 70.000 botellas y si las frutas y verduras las vemos en manzanas se botan 111 millones de manzanas”, comentó Buitrago.
En detalle el Banco de Alimentos concluyó que el 40% de los alimentos que se botan se centran en la poscosecha y el manejo de los alimentos; el 21% en supermercados, hoteles, restaurantes y plazas de mercado y el 16% en los hogares de los colombianos.
Esta cifra se justifica debido a que el 30,8 % de los colombianos admite que deshecha los alimentos porque cocina demasiada cantidad, el 31,2 % reconoce que la razón principal de su desperdicio es que no usa las sobras de los alimentos, y la razón más común para botar comida, en el 33,7 % de los encuestados, es que se pasa la fecha de vencimiento de los productos, según lo encontrado por WWF.
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