La Secretaría de Salud de Medellín informó que ocurrió una intoxicación masiva en la cárcel de mujeres El Pedregal, en Medellín. Cerca de 620 internas presentaron problemas de salud, al parecer, por ingerir comida en estado de descomposición.
“Fueron intoxicadas con alimentos que llegaron vencidos o que llegaron al mal estado al pabellón. Ello ocasionó que muchas de las privadas de la libertad generaran vómitos y diarreas”, expresó Eugenia Clavijo, directora de la Fundación Celdas con Dignidad.
Rita Almanza, líder de Epidemiología Secretaría de Salud de Medellín, manifestó que el personal del centro carcelario avisó sobre el problema el pasado domingo 5 de septiembre. En el lugar fueron evaluadas 1.170 personas y aseguró que entre otros de los síntomas presentados por las reclusas estaban dolores de cabeza y abdominales.
Además, la funcionaria indicó que en el sitio las mujeres afectadas recibieron atención médica, así como los medicamentos necesarios para tratar la intoxicación; sin embargo, ninguna de estas tuvo que ser trasladada a centros hospitalarios. Asimismo, según los testimonios de varias internas, los síntomas les empezaron tres días antes de que se hiciera el llamado a las autoridades sanitarias.
“Pudimos evidenciar en la comida que estaban recibiendo en ese momento, mal aspecto físico organoléptico”, apuntó Almanza, en diálogo con Telemedellín. Y por último, señaló que la Secretaría de Salud tomó muestras de los alimentos y llevó a cabo las respectivas inspecciones de salubridad.
Ahora, en el marco de las investigaciones, se espera que el encargado de preparar los alimentos entregue una explicación. Esto teniendo en cuenta que, si bien es el primer reporte que reciben este año en El Pedregal, sí se han presentado otros casos en estaciones de Policía.
A finales de abril de este año, el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC) expresó su preocupación por las precarias condiciones de salubridad en las que los alimentos son entregados a los reclusos del país, teniendo en cuenta los sucesos que se habían presentado en diversos departamentos.
De hecho, unas semanas atrás, el defensor de la población carcelaria en Antioquia, Jorge Camona Vélez, denunció que los privados de la libertad estarían recibiendo comida en muy malas condiciones, descompuesta y con gusanos, en las cárceles de El Pedregal, en Medellín, y la Paz de Itagüí, poniendo en riesgo su salud.
LOS RECIENTES PROBLEMAS CON EL PAE:
Durante las últimas semanas la Contraloría General de la República ha ejecutado la estrategia ‘No Más Conejo al PAE’ y ha encontrado varios inconvenientes con la contratación, implementación y/o manejo del Plan de Alimentación Escolar en todo Colombia. Ante la gravedad de los casos, el pasado 30 de agosto el contralor General, Felipe Córdoba, aseguró que, a nombre del organismo de control, impondrá sanciones a las entidades que no están prestando un servicio óptimo.
“Es muy desafortunado porque a veces entrega, de una u otra manera, raciones completamente distintas a lo que dice la tabla nutricional y la minuta nutricional que se debe entregar en cada uno de los colegios. Por esto, la Contraloría ha venido haciendo seguimiento permanente en todo este sentido y lo seguirá haciendo para que esto no pase. Sancionaremos a quien no esté entregando efectivamente las raciones como deben ser”, expresó Córdoba.
En Magdalena se evidenció uno de los panoramas más preocupantes, pues en las cocinas y comedores de varios colegios de este departamento hay roedores, insectos y comidas en descomposición. Uno de los ejemplos recientes fue informado desde la dirección de la Oficina de Planeación de la Contraloría General de la República, en vocería de Vanessa Varón Garrido, por el mal estado de los espacios de cafetería y comedor del colegio Rodrigo de Bastidas de Santa Marta.
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