Un nuevo estudio revela las graves consecuencias para los astronautas que podrían dejar los viajes a Marte

Mientras la NASA trabaja para enviar misiones al planeta Rojo en los próximo años, investigadores han identificado los principales riesgos de la radiación cósmica que supondría la travesía

Guardar

Nuevo

Los viajes a Marte presentan riesgos críticos de salud para los astronautas, según un reciente estudio (Imagen ilustrativa Infobae)
Los viajes a Marte presentan riesgos críticos de salud para los astronautas, según un reciente estudio (Imagen ilustrativa Infobae)

A medida que SpaceX y la NASA planifican misiones a Marte, surgen preocupaciones de salud significativas para los astronautas. Un reciente estudio publicado por la revista Nature revela que un viaje de ida y vuelta al planeta rojo puede ocasionar graves problemas renales, incluidos daños que podrían llevar a la necesidad de diálisis.

Los investigadores, en su análisis más amplio hasta la fecha sobre la salud renal de los astronautas, afirman que la radiación espacial representa un riesgo considerable. La radiación proveniente de los vientos solares y la Radiación Galáctica Cósmica (GCR, por sus siglas en inglés) puede provocar una serie de problemas de salud, tales como pérdida de masa ósea, debilitamiento del corazón y la vista, y el desarrollo de cálculos renales. “Lo que no sabemos es por qué se producen estos problemas, ni qué va a ocurrir con los astronautas en vuelos más largos”, explica Keith Siew del Centro Tubular de Londres.

Misiones espaciales largas pueden provocar daños renales y la necesidad de diálisis a los astronautas (NASA)
Misiones espaciales largas pueden provocar daños renales y la necesidad de diálisis a los astronautas (NASA)

Para comprender la magnitud del daño renal causado por la radiación, los científicos expusieron a ratones a dosis simuladas de GCR equivalentes a lo que un astronauta experimentaría en un viaje a Marte, el cual podría durar entre 1,5 y 2,5 años. Los resultados mostraron que tanto los riñones humanos como los de los animales presentan signos de contracción en menos de un mes en el espacio. Keith Siew destacó la gravedad del problema: “Sabemos que los riñones tardan en mostrar signos de daño por radiación. Para cuando esto se haga evidente, probablemente sea demasiado tarde para evitar la falla”.

El riesgo de la exposición a la GCR es tal que incluso se han identificado efectos permanentes o la pérdida de función renal en los astronautas. Si no se desarrollan métodos para proteger los riñones, un astronauta podría regresar de Marte necesitando tratamientos de diálisis. “Aunque un astronauta pudiera llegar a Marte, podría necesitar diálisis a la vuelta”, añadió Siew.

La problemática de la radiación espacial no es nueva. Las misiones espaciales cortas ya han evidenciado que los astronautas experimentan un aumento de problemas de salud, incluidos los cálculos renales. Sin embargo, el impacto de vuelos prolongados sigue siendo incierto. Stephen Walsh, coautor del estudio, sugiere que futuras investigaciones podrían conducir al desarrollo de fármacos para proteger los riñones de los astronautas. “A medida que conozcamos mejor la biología renal, quizá sea posible desarrollar medidas tecnológicas o farmacéuticas que faciliten los viajes espaciales prolongados”, señaló.

Radiación desde los vientos solares y la Radiación Galáctica Cósmica amenaza riñones de astronautas (NASA)
Radiación desde los vientos solares y la Radiación Galáctica Cósmica amenaza riñones de astronautas (NASA)

Este estudio, además de alertar sobre los peligros para los astronautas, también vislumbra beneficios potenciales para la medicina en la Tierra. Los fármacos que se desarrollen para proteger los riñones de los viajeros espaciales podrían ser aplicables en tratamientos de radioterapia para pacientes con cáncer, aumentando la tolerancia renal a dosis más altas.

Estas misiones también plantean desafíos relacionados con la salud ósea, muscular y cardiovascular de los tripulantes. A medida que la humanidad se prepara para llegar al planeta rojo, es crucial entender y mitigar estos riesgos para garantizar la seguridad y el bienestar de los astronautas.

Elon Musk, propietario de SpaceX, ha expresado su optimismo sobre alcanzar Marte en 2029, mientras que la NASA se ha marcado el objetivo para 2040. Sin embargo, estas aspiraciones chocan con los serios riesgos para la salud identificados en la investigación. La información publicada en Nature este mes subraya la importancia de abordar estos desafíos antes de embarcarse en misiones humanas prolongadas fuera del sistema terrestre.

En suma, mientras la carrera hacia Marte continúa con planes ambiciosos, los recientes hallazgos científicos evidencian que garantizar la salud y seguridad de los astronautas es primordial. La radiación espacial y su impacto en los riñones representan un obstáculo significativo que debe ser superado para lograr que los viajes interplanetarios sean viables y seguros.

Guardar

Nuevo

Últimas Noticias