Los científicos están reevaluando los indicadores de inteligencia animal. Durante mucho tiempo, tanto investigadores como dueños de perros han debatido sobre los atributos que hacen que un animal sea más inteligente que otro. Sin embargo, con el aumento de estudios en una variedad más amplia de seres vivos, las distinciones se volvieron menos claras.
A principios de este año, un grupo de 40 investigadores de destacadas universidades firmó la Declaración de Nueva York sobre la Conciencia Animal. Este documento sostiene que recientes estudios indican que muchos más animales tienen capacidad de conciencia de lo que se pensaba. Asimismo, se reconoce el “fuerte respaldo científico” para considerar que mamíferos y aves poseen conciencia. Los estudios también sugieren una “posibilidad realista” de conciencia en otros vertebrados como reptiles, anfibios, peces y posiblemente incluso en cefalópodos y otros invertebrados.
Estos son los animales que están obligando a los científicos a reconsiderar la conciencia y cognición animal, desde los más familiares hasta los menos conocidos:
Elefantes
Los elefantes son considerados unos de los mamíferos más inteligentes, fuera de los primates, debido a sus grandes cerebros y fuertes lazos sociales. Se demostró que lloran a sus muertos e incluso los entierran. Su memoria duradera los hace solucionadores de problemas y usuarios de herramientas. En el Zoológico del Bronx, un elefante demostró ser capaz de reconocerse a sí mismo en un espejo, un indicador de autoconciencia. Además, estudios muestran que los elefantes son capaces de imitar sonidos de otros con alta precisión, demostrando una habilidad avanzada de comunicación.
Perros
Los dueños de perros siempre destacan la inteligencia de sus mascotas. Investigadores han encontrado que algunos perros pueden aprender más de cien palabras. Son hábiles en captar emociones humanas y pueden mostrar signos de celos. Esta inteligencia, creen los científicos, es un subproducto de la evolución junto a los humanos por miles de años. Además, estudios recientes han demostrado que los perros pueden entender gestos humanos y anticipar comportamientos basados en el lenguaje corporal, lo que subraya su capacidad para interactuar socialmente con las personas de manera compleja.
Cerdos
Los cerdos están entre los animales más inteligentes consumidos por humanos. Utilizan espejos para examinar su entorno y buscar comida. Una familia de cerdos verrugosos de Visayas utilizó palos como herramientas para construir nidos, un comportamiento nunca antes visto.
En 2021, se entrenó a un cerdo para usar un joystick y jugar un videojuego rudimentario. También se observó que los cerdos forman complejas estructuras sociales y pueden aprender unos de otros a través de la observación, lo cual sugiere una forma de aprendizaje social comparable a la de algunos primates.
Delfines
Los delfines están en la cima de la escala de inteligencia animal. Según un estudio de 2016, se comunican mediante sonidos complejos similares a palabras y oraciones. En Brasil, cooperan con pescadores para cazar y han ayudado a nadadores en ataques de tiburones. Su gran relación cerebro-peso contribuye a su notable inteligencia.
Además, los delfines han demostrado tener una comprensión de las relaciones espaciales y el uso de herramientas, lo que incluye el uso de esponjas marinas para proteger sus hocicos mientras buscan comida en el lecho marino. Esta habilidad no solo es aprendida, sino también transmitida entre generaciones, sugiriendo una cultura animal compleja.
Loros
Los loros pueden hacer más que repetir palabras humanas. Estudios demostraron que son capaces de resolver juegos de lógica que confunden a niños de cinco años. Investigadores entrenaron a loros para usar tabletas y comunicarse entre sí mediante videoconferencia. Los loros mostraron interés en chatear con sus amigos de larga distancia. Además, los loros, especialmente el loro gris africano, han demostrado una capacidad notable para comprender conceptos abstractos como forma, color y cantidad.
Pueden incluso pedir específicamente tipos de alimentos o juguetes por su nombre, lo que indica una memoria y comprensión complejas.
Cuervos
Los cuervos pueden contar hasta cuatro, habilidad que se atribuye a su gran prosencéfalo. Pueden fabricar herramientas de palos con forma de gancho para extraer insectos de los árboles. Además, estudios han mostrado que los cuervos tienen la capacidad de planificar el futuro. Son conocidos por almacenar alimentos en diferentes lugares y recordar su ubicación. También han demostrado la capacidad de entender perspectivas ajenas, lo cual les permite engañar a otros animales, incluyendo a otros cuervos, para proteger sus cachés de comida.
Pulpo
Los pulpos han captado la atención por su inteligencia. En cautiverio, identifican a diferentes humanos y lanzan tinta a quienes no les agradan. Incluso en la naturaleza, son expertos en cambiar de forma y color para mimetizarse y evitar depredadores. Algunos pulpos han sido observados usando herramientas, como conchas de coco, para protegerse. En otros estudios, se ha visto a pulpos resolver laberintos y desatornillar frascos para acceder a la comida, mostrando una elevada capacidad de resolución de problemas y uso de herramientas.
Abejorros
Los abejorros han sorprendido a investigadores por su inteligencia. En 2016, aprendieron a tirar de una cuerda para obtener recompensas. Otras abejas imitaron esta conducta. También tienen una sofisticada comprensión del conteo y del concepto de cero. Además, los abejorros han demostrado habilidades de navegación complejas, regresando a su colmena tras viajados kilómetros. Estas habilidades indican una capacidad significativa para procesar información y tomar decisiones basadas en su entorno.
Cangrejo de río
Los cangrejos de río pueden mostrar síntomas de ansiedad tratables con medicamentos similares al Valium. Un estudio de 2014 demostró que tras una experiencia estresante, evitaban las zonas claras del tanque. La inyección de un medicamento contra la ansiedad les permitió superar este comportamiento.
Adicionalmente, los cangrejos de río mostraron comportamientos sociales complejos y pueden responder a desafíos ambientales de manera adaptativa, lo que sugiere una capacidad de procesamiento cognitivo que no se había reconocido previamente.
Pez limpiador
El pez limpiador, común en los arrecifes de coral, ha pasado la prueba de la marca en el espejo. Aunque al principio creían que su reflejo era otro animal, algunos comenzaron a interactuar con él de maneras inusuales y reconocieron puntos marrones añadidos a su cuerpo. Este comportamiento sugiere una capacidad de autorreconocimiento que rara vez se observa en los peces y señala una comprensión de sí mismos en su entorno.