Japón lanzó con éxito un satélite avanzado de observación terrestre, el ALOS-4, utilizando su nuevo cohete H3. Este satélite tiene como principales funciones tareas de seguridad y respuesta a desastres. El lanzamiento tuvo lugar desde el centro espacial Tanegashima, ubicado en una isla en el suroeste del país, según informó la Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial (JAXA) en una emisión en vivo.
Durante la transmisión en directo, la JAXA explicó que el cohete H3 despegó sin contratiempos y liberó su carga aproximadamente 16 minutos después del lanzamiento, tal como estaba programado. La emisión destacó que el ALOS-4 está diseñado para observar la Tierra, recopilar datos necesarios para la cartografía y también responder a situaciones de desastres naturales. Adicionalmente, el satélite tiene la capacidad de monitorear actividades militares, incluyendo lanzamientos de misiles, gracias a un sensor infrarrojo desarrollado por el Ministerio de Defensa de Japón.
“El ALOS-4 es el sucesor del actual ALOS-2 y puede observar una zona mucho más amplia”, explicó JAXA. Japón planea mantener ambos satélites en funcionamiento por el momento, para asegurarse de cubrir sus necesidades de observación y seguridad desde el espacio.
El lanzamiento del cohete se había programado inicialmente para el domingo, pero fue retrasado debido a las malas condiciones climáticas en la región. Es importante destacar que este fue el tercer lanzamiento del sistema H3. El primer vuelo con esta tecnología fue un fracaso que resultó en la destrucción del cohete y su carga, el satélite ALOS-3. Sin embargo, el segundo vuelo realizado el 17 de febrero fue exitoso, estableciendo la confianza en este nuevo sistema de transporte espacial.
JAXA y su principal contratista, Mitsubishi Heavy Industries (MHI), han estado trabajando en el desarrollo del sistema H3 como sucesor del actual programa H-2A. “MHI tomará el relevo a JAXA en la producción y los lanzamientos”, indicó un portavoz de la agencia durante la transmisión. Se espera que MHI haga rentable el uso del H3 al reducir el coste de lanzamiento a aproximadamente la mitad del H-2A.
Japón considera que contar con una capacidad de transporte espacial estable y competitiva a nivel comercial es crucial para su seguridad nacional y su programa espacial. Además, el avance en su capacidad de lanzamiento es visto como un componente vital para preservar su posición en el ámbito espacial internacional.
El satélite ALOS-4 está equipado con tecnología capaz de observar la Tierra de manera más detallada y en superficies más extensas comparado con su predecesor, el ALOS-2. Esta capacidad mejorada permitirá a Japón no solo optimizar sus respuestas a desastres naturales, sino también contribuir significativamente al mapeo global y al monitoreo ambiental.
En cuanto a la estabilidad y competitividad comercial, Japón apuesta por el sistema H3 para asegurar su lugar en el mercado internacional, subrayando la importancia de reducir costos y mejorar la eficiencia en los lanzamientos espaciales. Este enfoque es fundamental para mantenerse a la par con otras naciones líderes en el sector espacial.
JAXA, continuó enfatizando la colaboración con MHI para asegurar el éxito de los futuros lanzamientos y el retiro programado del sistema H-2A después de dos vuelos más. El objetivo es simplificar y economizar el proceso de lanzamiento espacial, haciendo que Japón sea un competidor más atractivo y confiable en el campo de la exploración espacial.
El cohete H3, según difundió JAXA, está diseñado para ser más asequible y eficiente, y se espera que juegue un papel central en las futuras misiones espaciales de Japón. “Nuestro objetivo es hacer que el lanzamiento espacial sea más accesible y seguro”, declaró un representante de MHI.
La estrategia refleja la política de Japón de fortalecer sus capacidades tecnológicas y desarrollar una infraestructura robusta para el transporte espacial, que no solo beneficiará las misiones de seguridad nacional, sino también las de investigación científica y esfuerzos de cooperación internacional.