Los estreptococos del grupo A, como el Streptococcus pyogenes, son bacterias que pueden causar dolor de garganta y escarlatina. Pero también pueden provocar trastornos más graves, como el síndrome de choque tóxico estreptocócico.
En Japón, se ha detectado un preocupante aumento de los casos de personas con el síndrome de choque tóxico. El brote es también un llamado de atención para América Latina, donde ya el año pasado hubo un alerta de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) para mejorar la prevención y el acceso al tratamiento oportuno como una manera de evitar fallecimientos.
En Japón se habían registrado 941 casos en 2023, de acuerdo con el Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas (NIID). Este año, ya se habían notificado 378 casos en menos de dos meses.
Antes de la pandemia por el coronavirus, los casos de personas con el problemas estaban creciendo. Se frenó a partir de las restricciones en la movilidad en 2020, pero desde el año pasado volvieron a aumentar.
Cómo se transmite el Streptococcus pyogenes
Existen unos 80 serotipos diferentes de la bacteria Streptococcus pyogenes. El patógeno se puede transmitir cuando las personas infectadas hablan, tosen o estornudan cerca de otras. Así se generan gotitas respiratorias que contienen bacterias.
Por qué preocupa el avance de la bacteria
La cepa identificada en Japón está provocando más muertes entre los pacientes menores de 50 años, según el NIID. Entre las 65 personas menores de 50 años a las que se diagnosticó el síndrome, 21 fallecieron entre julio y diciembre del año pasado, informó el periódico Asahi Shimbun.
También en Nueva Brunswick, una de las provincias orientales de Canadá, este año se reportaron al menos 50 casos confirmados de infecciones invasivas del grupo A y 9 personas fallecieron.
Qué se sabe sobre el Streptococcus pyogenes en América Latina
En diálogo con Infobae la presidente de la Sociedad Latinoamericana de Infectología Pediátrica (SLIPE), la doctora María Luisa Ávila-Agüero afirmó “los brotes por los estreptococos del Grupo A, como Streptococcus pyogenes, siempre son y serán un riesgo”.
En diciembre de 2022, la Organización Mundial de la Salud (OMS) había advertido sobre el aumento de casos de infección invasiva por estreptococos del grupo A en Europa, especialmente en niños menores de 10 años. También la OPS informó que habían crecido los casos en Uruguay.
En noviembre de 2023, el Ministerio de Salud de la Nación de la Argentina informó de un aumento significativo en la notificación de casos y fallecimientos por el Streptococcus pyogenes. Se planteó como hipótesis que la presencia de clones M1UK y un sublinaje de M1 con la toxina SpeC podrían estar asociadas al incremento de los afectados.
Según se informó días atrás en el Boletín Epidemiológico nacional, durante el año 2023 se notificaron en la Argentina 926 casos de infección invasiva por la bacteria, de los cuales 134 (14,4%) fallecieron.
Del total de esos casos, se consignó solo en 652 la presentación clínica de la infección. El 12% tuvieron choque tóxico estreptocócico. Entre los que murieron, el 32% tenía menos de 16 años y el 47,0% eran mayores de 50 años, con una mediana de 46,5 años.
Para Ávila-Agüero, “en la historia de la medicina el Streptococcus pyogenes se describe como un agente altamente mortal. Causando escarlatina que ahora es manejable con antibióticos. Lo que actualmente ocurre es que la bacteria está exhibiendo una variante capaz de producir una toxina llamada superantígeno”.
Por qué hay más afectados por Streptococcus pyogenes
La nueva variante -aclaró la especialista- “le proporciona una estrategia a la bacteria que puede contrarrestar al sistema inmune de las personas, por varias vías. Esto puede ocasionar brotes de manera más intensa y eventualmente con mayor enfermedad y muerte. Así que el riesgo del Streptococcus pyogenes es global. Hay que investigar, reportar y promover las medidas de salud pública generales, como el buen lavado de manos, no tocarse la cara y la nariz, entre otras”.
Las razones por las cuales han aumentado los casos de infecciones invasivas por los estreptococos están en estudio. “Hasta ahora no hay una explicación definitiva de causalidad sobre el incremento del número de casos de infección invasiva a nivel global y regional. Sin embargo, se plantean diversas hipótesis”, dijo a Infobae Silvina Ruvinsky, médica infectóloga pediatra, epidemióloga y prosecretaria del Comité Nacional de Infectología de la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP).
La aparición de nuevos serotipos o linajes así como cambios genómicos de la bacteria podrían aumentar su virulencia y la capacidad de evadir la respuesta inmunitaria. El mayor número de personas susceptibles es otra posible explicación, teniendo en cuenta la falta de exposición durante la pandemia como consecuencia de las medidas de aislamiento, comentó la doctora Ruvinsky.
“Otras posibles explicaciones incluyen la afección de pacientes con mayor riesgo de presentar infección invasiva (con diabetes, inmunocomprometidos, mayores de 65 años). El antecedente de infección respiratoria viral reciente o varicela se vincula con mayor riesgo de presentar infección invasiva”, informó la especialista en infectología.
Como recomendación para reducir riesgos, la doctora Ruvinsky enfatizó en que “se debe mantener al día el esquema de vacunación del calendario oficial para reducir el riesgo de una coinfección y sufrir cuadros graves”. Por el momento, no hay una vacuna disponible contra el Streptococcus pyogenes. Pero es importante tener las vacunas del calendario al día para evitar otras enfermedades que favorecen la invasión por esa bacteria.
Se debe evitar el contacto directo con heridas contaminadas y practicar el lavado de manos frecuente, aconsejó también la doctora Ruvinsky.
“Siempre que se detecta un brote por una bacteria o un virus en algún lugar en el mundo tenemos que estar en alerta. La situación de Japón debería reforzar la vigilancia epidemiológica y la atención sobre una infección, como la de Streptococcus pyogenes, en América Latina. A veces se subestima a esa bacteria”, opinó al ser consultado por Infobae el médico pediatra Fernando Burgos, jefe de la sección pediatría ambulatoria del Hospital Austral en la Argentina.
Dónde se aloja el Streptococcus pyogenes
El Streptococcus pyogenes es una bacteria que puede habitar normalmente en la piel y en la garganta de las personas sanas, sin causar enfermedad. Sin embargo, también es capaz de causar una gran cantidad enfermedades de distinta gravedad, indicó el doctor Burgos.
“La bacteria puede producir faringitis y escarlatina, pero también diferentes cuadros más graves, como el síndrome de choque tóxico estreptocócico”, expresó.
Cuáles son los signos de alarma para consultar
De acuerdo con el Ministerio de Salud de la Nación de Argentina, los signos de alarma por la presencia del Streptococcus pyogenes:
- Se debe consultar a un centro de salud u hospital cuando se registra la aparición de fiebre (mayor a 37°8) acompañada por dolor de garganta, dolor localizado en la piel con enrojecimiento y/o ampollas pequeñas.
- Si es posible para evitar el contagio, se recomienda hacer la consulta médica en el domicilio o en lugares con poca circulación de personas. De lo contrario, se sugiere concurrir al centro de salud más cercano.
- No hay que automedicarse ni darle medicamentos a los niños sin hacer la consulta médica
El tratamiento de la infección es con antibióticos, que deben ser indicados por profesionales de la salud. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) las personas con síndrome de “choque tóxico estreptocócico” necesitan atención médica hospitalaria. Suelen necesitar la administración de líquidos a través de una vena y otros tratamientos para ayudar a tratar el choque y la insuficiencia orgánica.