La obligatoriedad de la vacuna contra el COVID-19: expertos debaten la medida en la Argentina

Con el aumento de las infecciones en el mundo, varios países ya la exigen a la comunidad o al personal sanitario. Expertos opinaron a Infobae sobre una medida que genera polémica

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El debate por la vacunación obligatoria contra COVID se reinstala debido a los rebrotes por las nuevas variantes (REUTERS/Sergio Pérez)
El debate por la vacunación obligatoria contra COVID se reinstala debido a los rebrotes por las nuevas variantes (REUTERS/Sergio Pérez)

Con 260 millones de personas que ya fueron infectadas por COVID-19 en el mundo y con más de 5,2 millones de muertos a causa del SARS-CoV-2, el mundo se debate si las vacunas que la ciencia obtuvo en tiempo récord para frenar la actual pandemia por coronavirus deberían ser obligatorias o no.

Europa atraviesa la quinta ola de contagios con récord diario de infectados. Estados Unidos también vio crecer mucho los casos este otoño. Y en el Sudamérica, si bien los casos bajaron con la salida del invierno en septiembre y octubre, están comenzando a repuntar actualmente debido a la llegada de la variante Delta, un 80% más contagiosa que el virus original.

El Ministerio de Salud de la Nación aclaró el año pasado, antes de iniciarse en diciembre la campaña de vacunación contra el coronavirus, que la vacunación contra la COVID-19 no es obligatoria en el país. “Desde el Ministerio de Salud de la Nación y el Programa Ampliado de Inmunizaciones se aboga por construir y fomentar la aceptación y confianza en la vacunación como una estrategia de salud pública solidaria, equitativa y beneficiosa para el bienestar y la salud de las personas y de la población, basada en evidencia científica contundente y que ha salvado millones de vidas en el mundo como medida primaria de prevención. Así es que, en Argentina, la mayor parte de la población comprende los beneficios individuales y colectivos de la vacunación y la acepta voluntariamente”, sostuvieron.

Con 260 millones de personas que ya fueron infectadas por COVID-19 en el mundo y con  más de 5,2 millones de muertos a causa del SARS-CoV-2, el mundo se debate por la obligatoriedad de las vacunas (REUTERS/Sergio Perez)
Con 260 millones de personas que ya fueron infectadas por COVID-19 en el mundo y con más de 5,2 millones de muertos a causa del SARS-CoV-2, el mundo se debate por la obligatoriedad de las vacunas (REUTERS/Sergio Perez)

Incluso la Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció en agosto que no adhiere a la obligatoriedad de la vacunación contra la COVID-19 en ningún país, aunque sí defiende la importancia que tiene la inmunización. Debido al rebrote de contagios por la variante Delta y la ralentización de la inoculación, varios países optaron por este tipo de medida para algunos sectores de la población, principalmente al personal de salud o empleados estatales.

Sin embargo, la OMS marcó su postura al afirmar que “se opone a cualquier vacunación obligatoria”, aunque “debe explicarse a la población general cómo funcionan las vacunas, y lo importantes que son”, dijo en rueda de prensa la vocera de la organización Fadela Chaib, que resaltó que los inmunizantes son solo “una de las varias herramientas que tenemos en nuestras manos”, ya que expertos reiteraron que las vacunas no bastan en la lucha contra el coronavirus y deben combinarse con las medidas sanitarias para frenar los contagios.

Pese a las recomendaciones de la OMS, varios países ya anunciaron la obligatoriedad de la vacunación contra el coronavirus para su población o parte de ella. Austria fue noticia la semana pasada cuando anunció que la vacunación anticovid será obligatoria para todos sus ciudadanos a partir del 1 de febrero de 2022. En naciones asiáticas como Indonesia, Tayikistán y Turkmenistán también ya lo es. Lo mismo en el Estado del Vaticano.

El presidente de EEUU, Joe Biden se aplica un refuerzo de la vacuna contra COVID (REUTERS/Kevin Lamarque/File Photo)
El presidente de EEUU, Joe Biden se aplica un refuerzo de la vacuna contra COVID (REUTERS/Kevin Lamarque/File Photo)

Además, ya hay varios países que han ordenado a ciertos sectores de la sociedad que deben estar vacunados. En Estados Unidos, el presidente Joe Biden anunció el 9 de septiembre la vacuna obligatoria para unos 100 millones de trabajadores, funcionarios del gobierno federal y empleados del sector privado. Pero la justicia suspendió el 6 de noviembre el nuevo protocolo para los trabajadores de empresas de más de 100 empleados, que también estaban alcanzados en el decreto presidencial. En una conversación con periodistas, funcionarios de la Casa Blanca dijeron que a partir de dicha fecha las inspecciones laborales incluirán controles sobre la orden de vacunación, con sanciones de 13.653 dólares por violación.

En Francia, la obligatoriedad se aplica al personal de los hospitales, residencias de tercera edad, bomberos, conductores de ambulancias y cuidadores domésticos. También en Grecia e Italia la vacuna es obligatoria para los trabajadores de residencias y personal sanitario. En medio del histórico rebrote que vive Alemania por los contagios con la variante Delta, las autoridades están evaluando que la vacuna sea obligatoria para el personal sanitario y asistencial a partir de 2022, según adelantó el diario Spiegel. Los jefes de Gobierno regionales en su reunión del martes con la canciller en funciones, Angela Merkel, y su probable sucesor, Olaf Scholz, acordaron impulsar la obligatoriedad de la vacuna entre el personal sensible.

En Inglaterra, los empleados de los centros para mayores deben estar completamente vacunados y los trabajadores sanitarios públicos a partir de abril de 2022. En Letonia, las empresas pueden imponer “vacaciones forzadas no pagadas” a los trabajadores no vacunados y luego despedirlos al cabo de tres meses. Los políticos que no se inmunicen quedarán suspensos de sus funciones y retribuciones hasta que no lo hagan. Hungría, donde la vacuna ya es obligatoria para los trabajadores sanitarios, allanó la vía en octubre para que también lo sea para empleados y funcionarios.

Varios países están imponiendo la obligatoriedad de las vacunas contra coronavirus (REUTERS/Yara Nardi)
Varios países están imponiendo la obligatoriedad de las vacunas contra coronavirus (REUTERS/Yara Nardi)

Expertos debaten la obligatoriedad

El infectólogo Tomás Orduna, asesor presidencial en la actual pandemia, se refirió a la suba de casos de coronavirus en las últimas horas: “Sonó un poco fuerte los más de 2.000 casos de ayer. Seguimos en contexto de pandemia, no hay que olvidarse y tenemos eventos masivos, entrada de turistas, movimiento de argentinos saliendo al extranjero, todo esto hay que vigilarlo”, dijo en declaraciones a El Destape Radio. “Tenemos a favor que estamos en verano. La mayoría de la gente sigue usando barbijo. Con estos números no hace falta una nueva medida restrictiva pero sí podemos corregir cosas mirando lo que pasa en Europa”, agregó.

En ese sentido, Orduna aseveró: “Hay que ver como ponemos alguna obligatoriedad en la vacuna del COVID. Si no puede ser general, sí [debe hacerse] en determinadas actividades. Ninguna vacuna llegó a cerrar el proceso para terminar con la autorización de emergencia y no descarto que en el futuro la vacuna contra el COVID tenga que ser obligatoria”.

Consultado por Infobae, otro de los asesores del gobierno nacional respecto al coronavirus, el doctor Luis Cámera, dijo estar en contra de la vacunación obligatoria. “No estoy a favor de la vacunación obligatoria, pese a que cuando uno es niño, la escolaridad hace que sean obligatorias. Creo que para adultos y también para niños en este contexto de COVID tiene que ser voluntaria. Por supuesto que hay que concientizar a las personas a que se vacunen. Me parece que colocarle a la vacuna el rango de obligatoria va a generar mucha resistencia y polarización de la población sin ningún sentido. Tampoco hay una fuerza bien clara como para exigir esa obligatoriedad. En cambio hay que seducir a la población a que se vacune”, precisó Cámera.

A casi un año de la aplicación de las vacunas contra coronavirus, todavía hay importantes rebrotes (REUTERS/Sergio Perez/File Photo)
A casi un año de la aplicación de las vacunas contra coronavirus, todavía hay importantes rebrotes (REUTERS/Sergio Perez/File Photo)

Tenemos que tener en cuenta que las actuales vacunas contra el coronavirus están autorizadas. No son vacunas aprobadas definitivamente. Por eso no se puede hacer obligatoria su aplicación. Para que una vacuna sea obligatoria en nuestro país, debe entrar en el calendario de vacunación y tienen que estar aprobada definitivamente. También las autoridades tienen que tener en claro a qué grupos involucrará esta obligatoriedad”, indicó el infectólogo Ricardo Teijeiro por vía telefónica.

Y agregó: “Ahora bien, hacer un pasaporte verde, como se está haciendo en Europa, donde se dice que una persona no puede ingresar a un lugar cerrado si no está vacunado o con un test de PCR realizado en las últimas 48 horas, habría que revisarlo. Porque el hecho no es que la persona que entre a un determinado lugar cerrado es un riesgo individual. Lo que hace es poner en riesgo a todo el grupo social que está allí. Y eso hay que evitarlo”.

El médico infectólogo jefe de la Sección Infectología y Control de Infecciones del CEMIC, Pablo Bonvehí, afirmó: “Como pasa con todas las vacunas, hay que educar, difundir información cierta y divulgar los beneficios de la vacunación. Muchas veces la gente no se vacuna por falta de información. Hay que trabajar contra las noticias falsas respecto a las vacunas. Yo creo que a medida que pasa el tiempo se va adquiriendo más confianza en las vacunas, se ve el impacto positivo que tienen, y eso también contribuye a que cada vez más gente se vacune.

Las internaciones graves ocurren mayormente en personas no vacunadas contra COVID. (EFE/Carlos Ortega)
Las internaciones graves ocurren mayormente en personas no vacunadas contra COVID. (EFE/Carlos Ortega)

Y agregó: “En cuanto a la obligatoriedad el tema radica en los controles. Hoy todas las vacunas que están en el Calendario Nacional de Vacunación son obligatorias. Y si estas vacunas contra COVID ingresan al mismo, van a ser obligatorias. Respecto a los controles y prohibiciones que realizan algunos países europeos a la población no vacunada, creo que debería ser la última instancia. Lo más importante es seguir informando y difundiendo el impacto favorable que han tenido las vacunas que nos permiten hoy estar en la situación que estamos. Hay que generar un aumento en las tasas de cobertura, aplicar los refuerzos y terceras dosis a aquellos que la necesitan. Con todas esas medidas, la obligatoriedad va a ser una circunstancia no tan necesaria como ocurren en algunos países europeos”.

El doctor Lautaro de Vedia, infectólgo y miembro de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI) indicó a Infobae que en este tema colisionan varios derechos. “Uno es el derecho a la libre elección. Pero por encima de ello, creo que está la obligación comunitaria que tenemos para promover la protección que brindan las vacunas. Se agrega otra dificultad: cómo se controla. Es decir, cómo hacer para decirle a un chico que no puede entrar al colegio si no está vacunado. Y eso colisiona con el derecho a la educación. Hay muchos derechos en juego”.

Mi opinión es que no debe ser obligatoria. Pero podrían ponerse limitaciones a quienes no se vacunen como no viajar al exterior o no poder sacar el registro si no se vacuna. El tema es difícil, que en otras patologías fuera del COVID ha llegado a instancias judiciales. Yo creo que la sociedad debería tomar conciencia de esto e ir voluntariamente a vacunarse. Para eso tenemos que trabajar intensamente todos los sectores. No soy amigo de la obligatoriedad, pero es un tema complejo”, insistió el especialista.

Suba de contagios

Quienes no estén vacunados podrían sufrir restricciones para viajar o circular (EFE/Mario Guzmán)
Quienes no estén vacunados podrían sufrir restricciones para viajar o circular (EFE/Mario Guzmán)

El Ministerio de Salud de la Nación informó ayer que en las últimas 24 horas se registraron 43 muertes y 2.234 nuevos contagios de coronavirus: la cifra más alta desde el 17 de septiembre, cuando se reportaron 2.308. Distintos especialistas le adjudican la suba de casos al fin de semana largo, donde se movió un 25% más de turistas que antes de la pandemia.

Así, el país acumula un total de 5.319.867 positivos desde el comienzo de la pandemia, mientras que los fallecimientos fueron 116.458. Por otra parte, de ayer a hoy fueron realizados 41.234 testeos, con un índice de positividad del 5,41%. Desde el inicio del brote, se llevaron a cabo 25.988.908 pruebas diagnósticas para esta enfermedad. A la fecha, se registran 18.436 casos positivos activos en todo el país y 5.184.973 recuperados. Del total de muertes reportadas ayer, 21 son hombres y 22 son mujeres. La provincias que más fallecidos registraron fueron Buenos Aires (12), Chubut (10) y Tucumán (7).

Ayer, precisamente el ministro de Salud de la Provincia de Buenos Aires, Nicolás Kreplak, llamó a “sentarse a reflexionar” respecto de la nueva ola de casos de COVID-19 que se está produciendo en Europa con el objetivo que, quienes aún no se han vacunado, lo hagan. Reiteró que es posible que pueda “haber en el verano algún rebrote” y “sí, esperamos” que lo haya en el invierno. Por eso, esa estación del año “nos tiene que agarrar con un porcentaje de vacunación muchísimo más alto”, subrayó, y expresó su especial preocupación porque en la Provincia de Buenos Aires “tenemos cerca de un 35% a 40% de la población no vacunada de los niños” de entre 3 y 11 años.

Controles sobre protocolos COVID se imponen en comercios de Alemania (REUTERS/Matthias Rietschel)
Controles sobre protocolos COVID se imponen en comercios de Alemania (REUTERS/Matthias Rietschel)

La idea sería que no nos pase” como lo que está ocurriendo en Europa, donde en países como Alemania, Países Bajos o el Reino Unido, existe un importante aumento de casos de COVID-19 promovido por las personas que se niegan a vacunarse, dijo. Lo ideal sería que “nos agarre en mejores condiciones, incluso que a Portugal y España, que tienen porcentajes de vacunación más altos que los argentinos y están en mejores condiciones que otros países” de esa región. “Pero sin embargo están viviendo una situación de aumento de los casos significativa”.

Tenemos tiempo, si bien podría haber en el verano algún rebrote, y esperamos que no sea de una magnitud importante, como sí esperamos que pueda haber en el invierno próximo, (que) nos tiene que agarrar con un porcentaje de vacunación muchísimo más alto, con primeras, con segundas y con todas las terceras dosis que sea necesario”, subrayó, en declaraciones a radio Urbana Play. Si bien reiteró que el grupo de personas de entre 18 y 39 años “es el grupo que menos se vacuna”, expresó su preocupación por que los padres no inscriban a los niños de 3 a 11 años, que desde octubre pueden acceder a inocularse con Sinopharm.

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