La vacuna monodosis rusa Sputnik Light tiene un alto perfil de seguridad y genera una fuerte respuesta inmune celular y humoral contra el coronavirus. Así lo confirmó la prestigiosa revista médica The Lancet que publicó un nuevo estudio científico del Centro Nacional de Investigación de Epidemiología y Microbiología Gamaleya de Moscú, que detalla que el fármaco desencadenó una respuesta inmune en personas que no tenían anticuerpos (seronegativas) y en aquellas que se recuperaron de la enfermedad (seropositivas).
Para llegar a esta conclusión, los investigadores midieron la inmunidad humoral específica del antígeno (anticuerpos) y la seguridad (número de participantes con eventos adversos monitoreados durante todo el estudio) hasta el día 42 después de la vacunación. Las medidas de resultado secundarias fueron la inmunidad celular específica (medida por la proliferación de células T CD4 + y CD8, entre otras) y el cambio en los anticuerpos neutralizantes, también hasta el día 42 para este trabajo. El análisis de los anticuerpos neutralizantes del SARS-CoV-2 mostró tasas de seroconversión del 81,7% y del 92,9% al día 42.
“El uso independiente de Sputnik Light también proporciona una eficacia mucho mayor contra infecciones graves y hospitalizaciones”, afirmó el estudio, en el que también se destaca que la mayoría de efectos secundarios que se observaron durante el estudio “fueron leves o moderados” y no se detectó “ningún tipo de evento adverso grave”.
Al respecto, desde el Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF), que se encarga de la distribución y la venta del fármaco, indicaron que Sputnik Light “es una vacuna muy eficaz” cuando se utiliza tanto de forma independiente como cuando se aplica como refuerzo. Así lo aseguró el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
En estudio previos publicados por el Centro Gamaleya basados en datos de 28.000 personas en Moscú han demostrado que la vacuna Sputnik Light administrada de forma independiente tiene una eficacia del 70% contra la variante Delta del coronavirus durante los primeros tres meses después de la vacunación. Además, la vacuna tiene una eficacia del 75% en sujetos menores de 60 años. La eficacia de Sputnik Light contra la variante Delta cuando es aplicada como refuerzo de otras vacunas estará cerca de la eficacia contra la variante Delta de la vacuna Sputnik V: más del 83% contra la infección y más del 94% contra la hospitalización.
Los científicos rusos comunicaron que la vacuna ha demostrado una eficacia superior en comparación con algunas vacunas de dos dosis, que tienen una disminución importante de su eficacia contra la variante Delta, cinco meses después de su aplicación, a menos del 50%.
Según datos de vacunación en el mundo real, la inyección ha demostrado una eficacia de entre 78,6% y 83,7% entre los adultos mayores. Eso se desprende de datos oficiales del Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires. También, el Ministerio de Salud de Paraguay determinó que Sputnik Light tenía una eficacia de 93,5% durante la campaña de vacunación en curso del país.
La vacuna se está probando como una dosis de refuerzo en varios ensayos clínicos en todo el mundo. En particular, la combinación de AstraZeneca / Sputnik Light muestra niveles de inmunogenicidad más altos que la vacuna AstraZeneca original. Además, el RDIF y el Ministerio de Salud de Argentina copatrocinan el primer ensayo de combinación de múltiples vacunas dirigido a 2.800 sujetos (560 en cada una de las 5 provincias: Ciudad y Provincia de Buenos Aires, además de Córdoba, La Rioja y San Luis).
Los resultados provisionales del estudio en Argentina sobre regímenes heterólogos que combinan Sputnik Light y vacunas producidas por AstraZeneca, Sinopharm, Moderna y Cansino de más de 1.000 voluntarios muestran que Sputnik Light es un refuerzo universal eficaz para estas vacunas. Cada combinación de “cóctel de vacunas” con Sputnik Light proporcionó un título de anticuerpos más alto el día 14 después de administrar la segunda dosis en comparación con los regímenes homogéneos originales (la misma vacuna en la primera y la segunda dosis) de cada una de las vacunas.
Los datos de Argentina también demostraron un alto perfil de seguridad del uso de Sputnik Light en combinaciones con todas las demás vacunas sin eventos adversos graves después de la vacunación en ninguna combinación.
Kirill Dmitriev, director del RDIF, dijo a Reuters que esperaba que la Sputnik Light acabe por convertirse en la principal vacuna rusa contra la COVID-19. “Creemos que la Sputnik Light podría ser la principal vacuna dentro de un año, cuando muchas personas sólo tengan que volver a vacunarse o hayan padecido COVID y no necesiten la Sputnik V”, dijo Dmitriev.
Hasta el momento, el uso de la vacuna monodosis fue autorizado en más de 15 países, mientras en otros 30 Estados se está llevando a cabo el proceso de registro.
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