Una nueva herramienta se suma a la lucha por derrotar al coronavirus y la enfermedad COVID-19 que genera. La Organización Mundial de la Salud autorizó hoy el uso de emergencia a una nueva vacuna contra el COVID-19 fabricada en India llamada Covaxin.
La agencia de salud de la ONU dijo en un comunicado que autorizaba el uso de Covaxin, desarrollada por el laboratorio indio Bharat Biotech en sociedad con el Consejo de Investigación Médica de India, el organismo de investigación del gobierno. Eso convierte a Covaxin en la octava vacuna contra el COVID-19 en ser aprobada por la OMS, después de Pfizer-BioNTech, Moderna, Johnson & Johnson, Oxford/AstraZeneca (y su versión india, Covishield), Sinovac y Sinopharm.
La vacuna se fabrica con un coronavirus muerto para provocar una respuesta inmune. “Esta es una vacuna a virus inactivados, que se administra en 2 dosis con al menos 14 días de diferencia cada una. Mostró buenas tasas de eficacia y seguridad en los estudios de Fase III. Hasta donde tengo entendido, aún no cuenta con la aprobación de ANMAT, aunque estimo que eso llegará rápido, a raíz de la aprobación de la OMS”, explicó a Infobae el infectólogo Lautaro de Vedia, ex presidente de la Sociedad Argentina de Infectología.
“Siempre suma tener vacunas, cuanto más haya, mejor, así nos cubrimos ante cualquier eventualidad, y tenemos alternativas para los diferentes tipos de pacientes”, expresó el especialista, dando a entender la importancia de contar con una nueva arma para derrotar la actual pandemia.
Covaxin en Argentina
El 4 de junio último, gobierno de la provincia de Buenos Aires anunció que firmó un acuerdo de aprovisionamiento para adquirir hasta 10 millones de vacunas Covaxin del laboratorio indio Bharat Biotech, extensible a 5 millones de dosis más. “Es un contrato condicionado y complementario a los nacionales, sujeto a la aprobación de ANMAT de una vacuna que ya está en Fase III y a que se eliminen las restricciones a las exportaciones en la India”, según detallaron el gobernador Axel Kicillof y Carlos Bianco, por entonces jefe de Gabinete de la administración bonaerense.
En rueda de prensa, el mandatario bonaerense quiso hacer una aclaración para evitar malas interpretaciones: “La cuestión es conseguir vacunas para los argentinos. Si fuera necesario y en el momento que estén disponibles, se las vamos a ofrecer al gobierno nacional para que las distribuya entre todas las provincias de la Argentina”.
Debido a la escasez de vacunas en el mundo y la limitación que tenía India para acceder a ellas, Covaxin había sido aprobada por la agencia reguladora de medicamentos de India en enero tras constatar un 81% de eficacia en los estudios clínicos. Esto fue meses antes de completarse las extensas pruebas en personas, lo que generó preocupaciones de expertos en salud de que la vacuna había sido aprobada prematuramente. Recién en julio pasado, el laboratorio Bharat Biotech publicó resultados que demostraban que la vacuna tenía una efectividad del 93% para prevenir casos severos de COVID-19 y aproximadamente 65% con la más contagiosa variante delta.
“El anuncio de este uso de emergencia expande la disponibilidad de las vacunas, las herramientas médicas más efectivas para acabar con la pandemia’', dijo la doctora Mariângela Simão, asistente del director general de la OMS para acceso a medicamentos y productos de salud.
Según lo que se observó en los ensayos -que siguen en curso-, “la inmunidad no se desarrolla inmediatamente después de la vacunación”. Por lo general, como se sabe, el cuerpo tarda algunas semanas en desarrollar inmunidad contra el virus. Mientras tanto, la persona vacunada aún puede infectarse, por lo que es recomendación que continué con todas las precauciones relacionadas con prevenir el contagio del COVID-19, como usar máscaras faciales, mantener la higiene de las manos y el distanciamiento social.
Los investigadores informaron que “la inmunidad se activa dos semanas después de recibir la segunda dosis”. Sin embargo, no está claro hasta ahora cuánto tiempo dura la inmunidad después de que se administran ambas dosis de la vacuna.
Sobre los posibles efectos secundarios, se supo que “puede haber síntomas leves al recibir la vacuna, como sensibilidad en el lugar de la inyección, dolor en el lugar de la inyección, enrojecimiento, picazón, erupciones cutáneas, fiebre, dolor de cabeza, dolor de cuerpo, vómitos y náuseas”. “En muy raras ocasiones puede producirse una reacción alérgica grave. Aún se están estudiando más efectos secundarios en ensayos clínicos”, publicó The Times of India.
La aprobación de uso de emergencia da a estas vacunas la posibilidad de entrar en el programa COVAX, creado por la OMS en cooperación con otras agencias para distribuir a bajo precio y de forma equitativa dosis de vacunas anticovid en todo el mundo.
Como en los casos anteriores, un grupo de asesores técnicos de la OMS examinó los estándares de calidad, eficacia y seguridad de la vacuna, desarrollada a base de versiones inactivadas del coronavirus SARS-CoV-2, causante de la COVID-19. Según la organización es “extremadamente apropiada para países de ingresos bajos y medios, por su facilidad de almacenamiento”.
“En un estudio realizado en colaboración con el Instituto Nacional de Virología y el Consejo Indio de Investigación Médica, salió a la luz que la vacunación produjo títulos neutralizantes contra todas las variantes emergentes clave probadas, incluidas B.1.617 (Delta) y B.1.1.7 (Alpha), identificadas por primera vez en India y el Reino Unido, respectivamente”.
SEGUIR LEYENDO