Ciudad de México, 5 nov (EFE).- Legislar en torno al aborto seguro es uno de los retos que afronta Latinoamérica en el tema, pues las mujeres en la región, especialmente las de contextos más vulnerables y pobres, siguen muriendo tras realizar esta práctica de forma clandestina e insalubre, advirtió este martes IPAS Latinoamérica y el Caribe (Ipas LAC).
“Lo que vemos todos los días es que, más allá del marco legal, una persona que está enfrentando un embarazo no planeado, una mujer, una niña que están enfrentando una situación de un embarazo forzado y han decidido abortar van a encontrar la manera de hacerlo más allá de la legalidad”, dijo a EFE María Antonieta Alcalde, directora ejecutiva de Ipas LAC.
La directiva señaló que uno de los retos de la región sigue siendo avanzar en la legislación para asegurar que, por lo menos, en las causales básicas “cuando la salud o la vida de la mujer embarazada corre peligro”, el aborto sea permitido.
“Ahí me parece que hay una deuda enorme que lo que está generando, porque además es un tema de justicia social, o sea, en El Salvador todas las mujeres que son encarceladas (por abortar) son pobres y son indígenas”, lamentó.
Pese a los avances que ha tenido el aborto en países como Colombia, Uruguay, Argentina y México, Alcalde planteó que lo que hace falta es la homologación de leyes, pues “no es posible que el ejercicio de tus derechos dependa de donde vives”.
En ese sentido, aplaudió el avance que ha tenido la propuesta de reforma al Código Penal de la Ciudad de México que busca que el concepto de aborto sea despenalizado en cualquier etapa del embarazo.
“Es fundamental avanzar hacia una legislación que elimine en su totalidad del delito de aborto, es el único servicio de salud que está regulado por el Código Penal y no por la ley de salud”, apuntó.
Lamentó que la pandemia por covid-19 y la elección de Gobiernos ultraconservadores sigan siendo barreras para realizar el aborto de manera legal y segura en la región.
Alcalde señaló que, un estudio del Population Council, realizado en Tapachula, Chiapas, al sur de México, apunta que alrededor del 70 % de las mujeres migrantes sufren abusos y violencia sexual y física durante su tránsito por el país.
Además, el mismo número desconocen que pueden tener acceso a servicios de salud, incluyendo el aborto, sin importar su estatus migratorio, lo que provoca que muchas de ellas tengan que enfrentar abortos inseguros y en condiciones insalubres.
Ante esta necesidad, las instituciones gubernamentales que atienden a la población migrante ofrecen servicios limitados en términos de tiempo, espacio y cobertura.
Las migrantes miran a estas instituciones con miedo, ya que forman parte del sistema de Gobierno que podría deportarlas, criminalizarlas o encarcelarlas.
También señaló que algunas de las organizaciones que trabajan con migrantes, sobre todo aquellas que son basadas en la fe, “no necesariamente se sienten preparados o cómodos dando esta información a las personas a las que sirven”.
Es por ello que las poblaciones en altos niveles de vulnerabilidad suelen preferir la atención virtual, sobre todo cuando se trata de temas estigmatizados o criminalizados, como el aborto.
Ante ello, Ipas LAC creó el 'chatbot' de violencia sexual y aborto seguro para personas migrantes, el cual ofrece información sobre violencia sexual, aborto seguro e instituciones y organizaciones que ofrecen apoyo.
La plataforma podrá ser usada de forma gratuita, anónima, confidencial y sin dejar rastro en el dispositivo desde el que se accede a la información, evitando así la criminalización.
“Esta es una herramienta que pretende que se pongan las manos de las y los migrantes”, apuntó.
Ipas LAC ha facilitado alrededor de 250.000 abortos seguros en la región en los últimos cinco años de labor. EFE