Brasilia, 31 oct (EFE).- El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, fue sometido este jueves a nuevos exámenes para evaluar el estado de una herida que sufrió en la nuca y, aunque se encuentra "estable", aún requiere cuidados, informaron este jueves fuentes médicas.
"El presidente no presenta ningún síntoma, pero debe mantener el acompañamiento clínico y realizar nuevos controles" en los próximos días, dice un boletín divulgado por el equipo médico que lo atiende tras lo que fue calificado por el Gobierno como un "accidente doméstico".
Lula, de 79 años, se cayó en su residencia oficial el pasado 19 de octubre y sufrió un golpe en la nuca, que le produjo una herida que requirió cinco puntos de sutura.
Desde entonces se encuentra bajo observación médica, aunque ha retomado gradualmente sus actividades y desde el viernes pasado despacha como es habitual en el palacio presidencial, con ciertas restricciones.
Una de las recomendaciones de los médicos ha sido evitar los viajes en avión, lo que le impidió asistir a la cumbre del foro BRICS, alianza conformada por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, que se celebró la semana pasada en la ciudad rusa de Kazán.
Por el mismo motivo, finalmente no acudió a la Cumbre de la ONU sobre Biodiversidad (COP16) en la ciudad colombiana de Cali y tampoco se desplazó a São Paulo, donde tiene su domicilio electoral, para votar en los comicios municipales del pasado domingo.
Asimismo, ha cancelado su asistencia a la Conferencia de la ONU sobre Cambio Climático (COP29) que se celebrará en noviembre en Azerbaiyán.
El boletín médico difundido este jueves agrega que el mandatario "debe seguir trabajando en Brasilia" durante los próximos días, lo cual sugiere que aún no ha sido liberado para viajar en avión. EFE
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