Médicos indios suspenden su huelga de hambre por la violación y asesinato de una médica

Los médicos en formación de Bengala Occidental terminan su huelga de hambre tras 16 días de protesta por la falta de seguridad en hospitales tras el violento caso de una colega en Calcuta

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Nueva Delhi, 21 oct (EFE).- Los seis médicos en formación del estado indio de Bengala Occidental que permanecían en huelga de hambre desde hacía 16 días por la falta de acciones en favor de la seguridad en los centros sanitarios, después de que una médica fuese violada y asesinada en un hospital de Calcuta, dieron por finalizada su protesta en forma de ayuno indefinido.

Un representante del Frente de Médicos en Formación de Bengala Occidental (WBJDF, por sus siglas en inglés) anunció en una comparecencia ante los medios de comunicación que la huelga de hambre de los seis facultativos ha finalizado tras 16 días.

"Hemos decidido que respetaremos la decisión de la gente común que nos ha apoyado en todo momento y retiramos nuestra huelga de hambre", dijo el portavoz del Frente, que ha liderado las protestas en el este de la India desde el pasado 9 de agosto, cuando una joven médica fue violada y asesinada en el hospital universitario RG Kar de Calcuta mientras realizaba un turno de trabajo de 36 horas.

No obstante, los miembros del WBJDF reiteraron que continuarán sus protestas.

La decisión de finalizar la huelga de hambre llegó tras una reunión de los médicos en formación con la jefa de Gobierno de Bengala Occidental, Mamata Banerjee, señalada por el WBJDF desde el inicio de las protestas.

La política, líder del partido Congreso Trinamool y una de las principales opositoras en la política india al primer ministro Narendra Modi, estuvo en el centro de la polémica por el caso del RG Kar.

La investigación del suceso, a cargo del Tribunal Supremo de la India y del Buró Central de Investigación de este país asiático (CBI, por sus siglas en inglés), se desarrolló con polémica, con acusaciones de corrupción y serias dudas sobre la imparcialidad de las fuerzas de seguridad y de las autoridades bengalíes desde que aconteció el caso, que terminó por adquirir un marcado cariz político.

La violencia sexual contra las mujeres en la India es un problema persistente, y con frecuencia provoca la reacción de una parte de la sociedad que exige más medidas para garantizar la seguridad de las mujeres frente a un problema complejo.

El último informe de crímenes de la India, que corresponde a 2022, registró 31.500 casos de violación solo en ese año, aproximadamente 86 por día. EFE

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