Valencia (España), 22 ago (EFE).- El conjunto de gimnasia rítmica de Brasil, presente en cinco de los últimos seis Juegos Olímpicos, y el de México, que nunca ha acudido al gran certamen universal, se juegan esta semana en Valencia (España) la plaza para París 2024, objetivo que les obliga a terminar entre los ocho mejores en los campeonatos del mundo que comenzarán este miércoles.
Bulgaria, Israel y España, que ocuparon el podio en los mundiales de 2022, lograron así su billete olímpico. En Valencia se reparten cinco más. Si no hay sorpresas y los tres ya clasificados siguen entre los puestos de cabeza, el corte olímpico se hará en la octava posición.
Es un objetivo al alcance de los conjuntos sudamericanos. Las brasileñas fueron quintas en el anterior mundial y las mexicanas acabaron sextas, un resultado sobresaliente que se ha visto refrendado en posteriores competiciones.
Maria Eduarda Arakaki, Deborah Medrado, Giovanna Oliveira, Sofia Pereira, Nicole Pircio y Barbara Urquiza defenderán las opciones de Brasil. Entre ellas, solo Pereira es novedad respecto al anterior mundial.
El conjunto de Brasil fue octavo en los Juegos de 2000 y 2004, su mejor resultado, pero no pasó del duodécimo lugar en la última edición, Tokio 2020.
También México confiará en la base del conjunto de 2022. Competirán en Valencia Dalia Alcocer, Sofia Flores, Julia Gutiérrez, Kimberly Salazar, Adirem Tejeda y Karen Villanueva, con Gutiérrez y Villanueva como novedades.
Después de Valencia, solo quedará en América una plaza olímpica disponible, para el conjunto que queda campeón continental en 2024.
Los conjuntos entrarán en faena directamente en la final del viernes, en la que presentarán un ejercicio con cinco aros y otro con tres cintas y dos pelotas. La suma de las dos notas decidirá el podio mundial, las cinco plazas olímpicas y los ocho conjuntos finalistas el domingo en cada modalidad.
En individual la representación latinoamericana es también pequeña y también es más difícil la meta de obtener alguna de las 14 plazas olímpicas en juego, sin contar una de Italia, una de Bulgaria y otra de Alemania, ya concedidas.
Las brasileñas Geovanna Santos, que fue olímpica en Tokio 2020 con el conjunto, y Barbara Domingos, campeona panamericana, la colombiana de origen venezolano Oriana Viñas y la mexicana Marina Malpica, finalista mundial en 2022, saldrán al tapiz dispuestas a romper el dominio europeo en este deporte.
Con todo, la ausencia de Rusia por las sanciones derivadas de la guerra de Ucrania abren la puerta a otros países que tradicionalmente no han estado en las posiciones de privilegio.
Las gimnastas individuales competirán el miércoles en aro y pelota y el jueves en mazas y cinta. Cada día se decidirán las medallas de esos aparatos. Y la suma el jueves de las tres mejores notas de las cuatro de cada gimnasta dará la lista de las 18 finalistas individuales y de las 14 plazas olímpicas.
Como en conjuntos, una plaza individual en los campeonatos panamericanos del año próximo será la única oportunidad restante para las gimnastas del continente si en Valencia no cumplen con su objetivo olímpico.
Las vigentes campeonas mundial, la italiana Sofia Raffaeli, y europea, la búlgara Boryana Kaleyn, son las grandes favoritas al oro absoluto en la final del sábado. Cuentan asimismo la también búlgara Stiliana Nikolova y la alemana Darja Varfolomeev, en unos Mundiales de claro predominio europeo.
En la final se suman las cuatro notas, sin descartar ninguna.
En la edición de 2022 el podio mundial absoluto lo conformaron Raffaeli, Varfolomeev y Nikolova, por ese orden.