¿Experimenta dolor y sequedad en los ojos después de un día bajo pleno sol? Estas pueden ser señales de una quemadura solar. Porque los ojos también necesitan una protección suficiente contra la radiación UV. Por ello, quien desee disfrutar de los rayos de sol durante sus vacaciones, no debería olvidar llevar un sombrero o bien unos lentes de sol para proteger sus ojos. La Asociación Profesional de Oftalmólogos de Alemania (BVA) recomienda usar gafas de sol o una gorra de visera como protección a partir de un índice UV de intensidad 3. Según indican las autoridades sanitarias germanas, esto corresponde a una exposición media a la radiación, para la que también se recomienda la protección solar en crema para la piel. El índice UV puede consultarse en las previsiones meteorológicas y en las aplicaciones del tiempo. Radiación solar suele ser mayor en lugares de vacaciones En los países del sur, en el mar o en las montañas, los ojos se ven especialmente expuestos a los rayos del sol, según puntualiza la BVA. Por lo tanto, se recomienda llevar lentes de sol con un filtro UV400, para ofrecer suficiente protección de la dañina luz ultravioleta. En principio, las gafas de sol protegen la superficie ocular de las quemaduras solares, comenta la asociación sobre los peligros de la radiación UV. Sin embargo, si los ojos estuvieron demasiado expuestos al sol, esto se manifiesta con dolor intenso, una conjuntiva hinchada, un fuerte lagrimeo de los ojos y una reducción temporal de la visión. Síntomas que desaparecen al cabo de ocho a 12 horas, según asegura la asociación profesional. Mantener reglas de higiene también en vacaciones Quien utilice lentes de contacto, no debe tirar por la borda en las vacaciones las normas de higiene habituales y debería meter en su maleta los productos de limpieza y cuidado necesarios. Y si la vista está irritada o reseca, debería tener los lentes de repuesto al alcance de la mano. Especialmente donde hay aires acondicionados no deben faltar las lágrimas artificiales para humedecer los ojos. Según la BVA, beber mucha agua o té de hierbas asimismo puede ayudar. En caso de que los veraneantes necesiten gotas para los ojos u otros medicamentos, estos también deben ser guardados de manera adecuada. Esto significa que lo mejor es almacenarlos en el refrigerador o en una nevera portátil, para evitar la exposición al calor. dpa