Los niños franceses mayores de 11 años deberán usar mascarilla cuando vuelvan a la escuela en poco más de una semana, en un intento de frenar la acelerada propagación del nuevo coronavirus, anunció el viernes el ministerio de Educación.
La nueva política llega cuando los nuevos casos de covid-19 se dispararon a 4.700 el jueves, un aumento masivo en comparación con el día anterior y un récord desde el desconfinamiento.
"El uso de mascarillas será sistemático dentro de las escuelas secundarias y no solo cuando no se pueda respetar la distancia física. Pero en el exterior, es una decisión local", indicó el ministro de Educación, Jean-Michel Blanquer, en una entrevista en televisión el jueves por la noche.
El gobierno proporcionará mascarillas a las familias con recursos limitados, analizando cada situación caso por caso, dijo Blanquer el viernes en una visita a un colegio en la región del Oise (norte), una zona muy golpeada por el virus.
La medida afecta a los alumnos de entre 11 y 18 años, que deben volver a la escuela el 1 de septiembre.
Blanquer descartó aplazar a nivel nacional el inicio del año escolar, algo que pedían algunos sindicatos de profesores preocupados por el repunte de contagios.
Los nuevos casos en Francia se han incrementado en las últimas semanas, al igual que el número de admisiones en los hospitales y en cuidados intensivos.
El miércoles, pediatras pidieron al gobierno establecer estrategias claras y precisas para hacer frente a los casos de covid-19 que aparezcan en las escuelas.
Blanquer indicó que estaría dispuesto a extender el uso obligatorio de la mascarillas para los niños de 9 y 10 años.
El uso de tapabocas es obligatorio en las zonas más concurridas de muchas ciudades de Francia, incluido París y Lyon, en el transporte público y en todos los espacios de trabajo compartidos.
Hasta ahora, la covid-19 mató a más de 30.400 personas en Francia.
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