(Twitter: imagen de televisión)
La imagen de un militar llorando al encontrar los cadáveres de una mujer y su hija en una pila de escombros tras el terremoto de la semana pasado ha estremecido a millones de mexicanos, principalmente al padre de esa familia, que se reunió con el oficial para agradecerle.
Tras lanzar una campaña en redes sociales que le permitiera ubicar a ese soldado desconocido y luego enterrar a su esposa e hija de dos años, Marco Gil finalmente se encontró este martes con Martín Moctezuma Luis, militar de 21 años que participó en su primera misión de auxilio a la población.
Ambos se abrazaron fuertemente, y ante el agradecimiento, el militar dijo: "Estaba cumpliendo con mi deber".
Días atrás, Gil, profesor de fotografía, escribió en Facebook: "Gracias porque sin saberlo me regalaste la oportunidad de despedirme de mi esposa e hija, gracias porque sin dudarlo arriésgate tu vida bajo los escombros".
El agradecimiento estaba acompañado de una imagen, tomada por el tío de Gil, también fotógrafo, que se ha vuelto viral en redes sociales: Luis se dobla en llanto, se lleva la mano a la frente, es sostenido por tres civiles que intentan consolarlo.
"Me conmovió. Tengo una niña de dos años, me trasladé a esa situación, a que pudiera ser yo", dijo Luis a la televisora Milenio antes del encuentro este martes en Jojutla, una de las comunidades más golpeadas por el terremoto de 7,1 grados del pasado 19 de septiembre.
"No esperó ningún tipo de reconocimiento como persona, solo que reconozcan a los militares (…), que (sepan que) estamos capacitados para este tipo de eventos de cualquier magnitud", añadió.
Luis es originario del sureño estado de Oaxaca, y su comunidad fue de las más afectadas por el sismo de 8,2 grados, el más potente registrado en México en un siglo, del 7 septiembre, y que tuvo su epicentro en el sureño estado de Chiapas.
En la última década, luego de que las Fuerzas Armadas fueron lanzadas en un polémico operativo antidrogas, los militares han sido seriamente cuestionados por la sociedad civil.
Sin embargo, los militares mexicanos son de los pocos en el mundo entrenados para el auxilio de la población en caso de desastre, en un operativo diseñado en los 60.
Pero esta vez, en las zonas afectadas por el terremoto se observó a civiles trabajando codo a codo con militares.
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