El caso del periodista Mauricio Ortega, quien había robado en Estados Unidos la camiseta del mariscal de los Patriotas de Nueva Inglaterra, Tom Brady durante el último Super Bowl, despertó indignación en distintos sectores.
En medio de un clima antimexicano propiciado por el discurso del presidente estadounidense Donald Trump, el periodista y ex director del tabloide La Prensa también revivió los recuerdos de otras veces que los mexicanos han metido la pata en el extranjero y dejaron mal parado el nombre de su país.
La lista va desde ex candidatos a la presidencia de México hasta funcionarios de la capital y ciudadanos comunes y corrientes que asistentes a los magnos eventos deportivos.
El fuego eterno en París
En julio de 1998, dos ciudadanos mexicanos mancillaron uno de los principales altares patrios de Francia al orinar sobre la llama eterna bajo el Arco del Triunfo en París.
El acto produjo la extinción del símbolo nacional galo colocado sobre la tumba del Soldado Desconocido.
Encender nuevamente la llama requirió de una ceremonia oficial a la que asistieron el entonces ministro de los ex combatientes franceses, Jean-Pierre Masseret, y la embajadora de México en ese país, Sandra Fuentes Beraín, quien depositó una ofrenda floral y expresó que México "lamentaba lo ocurrido".
Según un comunicado del Ministerio de la Defensa de Francia, los dos infractores, un hombre —Rodrigo Rafael Ortega— y una mujer, fueron detenidos e interrogados por la policía, que los dejó libres poco después.
Las autoridades francesas insistieron sobre lo inadecuado del acto, que "ha afectado la memoria de los muertos por Francia y su honor".
La flama llevaba 75 años prendida.
El tren en Japón
En 2002, durante la Copa Mundial de Fútbol Corea-Japón, un mexicano fue protagonista de un acto que detuvo la marcha a más de 250 kilómetros por hora del tren bala en Japón.
El aficionado, en estado de ebriedad, accionó la palanca de emergencia, por primera vez en la historia del servicio, obligando a hacer alto total a uno de los trenes más veloces del mundo.
Madrazo y el Maratón de Berlín
El político Roberto Madrazo Pintado fue, en 2006, el candidato del oficialista Partido Revolucionario Institucional (PRI) a la presidencia de México. Su nombre saltó a la prensa internacional en septiembre de 2007 cuando el comité organizador del Maratón de Berlín lo descalificó por hacer trampa para llegar en primer lugar en una de las categorías.
La trampa se descubrió gracias a que en los registros de los chips, que portan los corredores en sus zapatos, no se contaba con la información de Roberto Madrazo correspondiente al trayecto entre los kilómetros 20 y 35.
"A partir del kilómetro 35 se volvió a contar con el registro del político mexicano. De manera que la velocidad que supuestamente alcanzó el participante en ese trayecto fue de 21 minutos. Ninguna persona puede correr 15 kilómetros en ese tiempo", explicó a la prensa Mark Milde, del comité organizador.
Mandela con sombrero de charro
En junio del año 2010, un mexicano fue arrestado en Sudáfrica luego de que le colocara el tradicional sombrero de charro a un estatua de Nelson Mandela, activista y primer presidente de color del país.
La ocurrencia fue interpretada a nivel internacional como un insulto para los sudafricanos por el significado que Mandela tiene para el pueblo.
El aficionado fue dejado en libertad, pero sancionado con una prohibición para ver a la selección mexicana durante los partidos de la Copa Mundial de Fútbol que se realizaba en tierras sudafricanas.
Acoso en Brasil
Los mexicanos Mateo Codinas Velten, Rafael Miguel Medina Pederzini, Ángel Rimak Eguren y Sergio Israel Eguren Cornejo fueron acusados en el año 2014 de lesiones durante el acoso a una mujer.
Los cuatro fueron sentenciados a penas de entre seis meses y un año de cárcel pero salieron libres cinco meses después, luego de que los dos primeros fueran absueltos de los cargos y los otros dos encontrados culpables pero con derecho a fianza.
Estos mexicanos fueron acusados de agredir a dos hombres luego de un partido de fútbol. También fueron señalados por una agresión sexual contra la esposa del lesionado, un cargo que no procedió.
Según la demanda, los mexicanos estaban en un taxi que se detuvo en medio de una gran cantidad de gente que salía del partido México-Holanda, cuando uno de ellos acosó a una mujer que pasaba por la calle acompañada por su marido y su cuñado. Cuando el esposo intervino, los cuatro habrían salido del auto para atacar a los brasileños.
Sergio Eguren y Rafael Medina Pederzini eran funcionarios de la Delegación Benito Juárez (una especie de municipio) en Ciudad de México y fueron destituidos de sus puestos porque mientras estaban presos vencieron sus vacaciones oficiales.
LEA MÁS: