Los esfuerzos de Rusia para interferir en las elecciones presidenciales de 2024 se están intensificando, según funcionarios federales e investigadores. A pesar de las medidas de Estados Unidos para contrarrestar esta influencia—como la presentación de acusaciones, la confiscación de bienes y diversas advertencias públicas—, Moscú continúa promoviendo desinformación sobre la inmigración y la figura de la vicepresidenta Kamala Harris, con el objetivo de beneficiar al candidato republicano Donald Trump.
El mes pasado se reveló que un grupo de influencers de extrema derecha recibía fondos de figuras vinculadas a los medios estatales rusos. A pesar de la exposición, estos creadores de contenido siguieron difundiendo información falsa entre sus numerosos seguidores. Entre las falsedades propagadas se incluyeron afirmaciones desmentidas sobre haitianos en Springfield, Ohio, que supuestamente estarían comiendo mascotas.
Los rumores locales que dieron origen a estas historias fueron amplificados en internet por figuras de la derecha estadounidense, y por el propio Donald Trump. Sin embargo, investigadores afirman que actores rusos se involucraron agregando afirmaciones aún más exageradas con respecto a la inmigración y la raza. Esto ocurrió incluso después de que, a principios de septiembre, dos ciudadanos rusos fueran acusados de presuntamente lavar dinero para influir de manera encubierta en la opinión pública.
La incautación de 32 dominios web realizada por el gobierno de EEUU, que difundían noticias falsas de Fox News y The Washington Post, no logró detener la estrategia rusa, según investigadores. Las cuentas automatizadas que difundían enlaces a esas historias ahora comparten links a nuevos artículos “doppelganger” en versiones falsificadas de medios reconocidos. Algunos de estos afirman la “connivencia criminal” del Servicio Secreto en el último aparente intento de asesinar a Donald Trump.
La semana pasada, investigadores detectaron otra red rusa que difunde falsedades sobre Kamala Harris, específicamente, que presenta signos de Alzheimer, que su familia tiene lazos secretos con la “gran industria farmacéutica”, lo cual la llevaría a promover medicamentos bloqueadores de la pubertad , y que es marxista debido a que su abuelo enseñaba teoría marxista.
Clint Watts, encargado de los esfuerzos de Microsoft contra la desinformación gubernamental, señaló que los trolls rusos han migrado a nuevos sitios web para alojar noticias falsas, tácticas que podrían ser más efectivas ahora debido a la creciente intensidad de la contienda presidencial: “La audiencia es mucho más vulnerable cuanto más nos acercamos al día de las elecciones”, afirmó en una entrevista.
Lo peor aun estar por venir, advirtió Thomas Rid, académico de desinformación y ciberseguridad de la Universidad Johns Hopkins. Su mayor preocupación no es la desinformación, sino “una filtración real y noticiable de archivos sobre la campaña de Harris que marcará el ciclo de noticias”.
A principios de septiembre, los fiscales federales actuaron contra la red de sitios de noticias falsas y la financiación rusa de influencers. Los comentaristas conservadores implicados no han sido acusados y afirmaron desconocer que la empresa que les pagaba hasta 100.000 dólares semanales estaba respaldada por personas vinculadas a la red de propaganda estatal rusa RT.
Los constantes esfuerzos de los trolls y cuentas automatizadas respaldan la advertencia emitida la semana pasada por funcionarios de inteligencia de EEUU, quienes señalaron que Rusia está intensificando su campaña para que Donald Trump vuelva a la Casa Blanca. Según los funcionarios, Moscú confía en que un nuevo mandato de Trump reduzca el apoyo a Ucrania, su máxima prioridad.
Aunque las autoridades estadounidenses confiscaron dominios que alojaban sitios de noticias falsas, las cuentas de redes sociales afiliadas han comenzado a promocionar nuevos enlaces hacia sitios similares, según los investigadores.
Un tuit del 24 de septiembre que enlazaba a una noticia falsa de Fox News sobre los haitianos obtuvo más de 900 retuits y ningún “me gusta” dos días después, lo que sugiere una amplificación automatizada por bots en lugar de interacciones humanas, según investigadores de desinformación. La historia, titulada “Cuidado con los niños, los gatos y los coches: los haitianos quieren quitarte todo”, fue más allá de las falsedades difundidas por Trump, afirmando que un gato reportado como desaparecido fue encontrado “desollado como una canal de ternero en una guarida de migrantes”. En realidad, el animal fue hallado ileso en el sótano de su dueño.
Una historia falsa de The Washington Post, tuiteada el mismo día por otra cuenta de la red, describía el supuesto fracaso de las autoridades para detener al segundo presunto agresor de Trump como “verdadera connivencia criminal” y afirmaba que el sospechoso era “un fascista que comparte la posición de los nazis ucranianos”. Esta publicación acumuló más de 800 retuits y ningún “me gusta”. Las cuentas responsables fueron identificadas por el grupo activista de investigación Antibot4Navalny.
Sorprendentemente, las autoridades federales citaron numerosos documentos internos rusos en sus recientes acciones contra las campañas de desinformación de Moscú, algunos de los cuales ya habían sido reportados por The Post. Según Rid, quien analizó los documentos y escribió en Foreign Affairs, los responsables de estas ofensivas en redes sociales se quejaban de que, tras las continuas eliminaciones de cuentas por parte de Meta, X se había convertido en “la única plataforma de masas que podría ser utilizada actualmente en los Estados Unidos”. X no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
Otros documentos revelaron que los contratistas del gobierno ruso responsables de la campaña de noticias falsas conocida como “Doppelganger” consideraban la cobertura de los medios estadounidenses y las acciones de las empresas tecnológicas en su contra como prueba de que eran temidos y, por eso, merecían mayor financiación del gobierno ruso, según escribió Thomas Rid.
Nuevas redes de propaganda siguen saliendo a la luz, como una identificada por la empresa de seguimiento de desinformación Alethea Group, que incluye 77 cuentas de X que generan contenido original y más de 400 que amplifican esas publicaciones. Esta red ha difundido los falsos rumores de la salud y la familia de Kamala Harris mencionados previamente.
Después de que el FBI explicara en una declaración jurada de 277 páginas detalles sobre la campaña de influencia contratada, la red comenzó a difundir la idea de que Ucrania estaba detrás de ella. El 10 de septiembre, por ejemplo, el usuario de X “Jhon Piell”, desde la cuenta ahora suspendida @salman1212120, publicó un video en el que citaba a Eliot Higgins, fundador del grupo investigativo Bellingcat, afirmando que la operación era “un proyecto complejo y peligroso de Ucrania”.
“Menos de media hora después de la publicación del video, fue retuiteado al menos 76 veces en menos de 60 segundos por una red de cuentas, todas creadas en tandas entre el 2 y el 8 de septiembre de 2024″, escribió Alethea.
Rusia ha apuntado durante mucho tiempo a Bellingcat y Higgins, quienes han expuesto agentes de inteligencia involucrados en complots de asesinato y desinformación. Ahora, busca desacreditar su trabajo y atacar a Kamala Harris simultáneamente. Higgins publicó el miércoles que un video falso de Fox afirmaba que él había descubierto que un inmigrante agredió a uno de los asistentes de Harris. El tuit obtuvo más de 16.000 visualizaciones en menos de cinco minutos sin recibir ningún retuit ni “me gusta”.
Es complicado determinar cuántas de esas visualizaciones provienen de usuarios reales, así como evaluar el impacto en los votantes. Sin embargo, los expertos en desinformación advierten que, aunque las mentiras sean evidentes, su proliferación dificulta que las verdades resulten creíbles.
Rusia ha logrado algunos éxitos, como un video viral que acusaba falsamente a Kamala Harris de estar involucrada en un accidente de coche con fuga, el cual superó las 7 millones de visualizaciones.