China anunció que antes del martes 1 de octubre de 2024 concederá ayudas puntuales en efectivo a personas en situación de extrema pobreza, en un inusual anuncio de ayuda directa apenas un día después de desvelar un amplio programa para estimular la segunda mayor economía del mundo.
El Ministerio de Finanzas y el Ministerio de Asuntos Civiles concederán subsidios de subsistencia a los grupos desfavorecidos, incluidos los muy pobres y los huérfanos, antes de la fiesta del Día Nacional de la próxima semana, informó el miércoles 25 de septiembre la cadena estatal CCTV, sin dar más detalles.
Las autoridades locales deben asegurarse de que los fondos lleguen a sus destinatarios antes del 1 de octubre, aniversario de la fundación de la República Popular, para mostrar “el amor y el cuidado del partido y del gobierno por las personas necesitadas”, según el informe.
Aunque se desconoce la cuantía, el despliegue de donaciones únicas en un periodo de tiempo tan breve parece ser un cambio para un gobierno que lleva mucho tiempo evitando lo que el presidente Xi Jinping denomina asistencialismo. El anuncio se produjo poco después de que los máximos responsables monetarios y financieros del país dieran a conocer una serie de recortes de tipos y medidas de flexibilización destinadas a frenar la ralentización económica.
Los ministerios presupuestaron 22.000 millones de dólares para ayudas económicas y subsidios a personas en situación de extrema pobreza, huérfanos y personas sin hogar este año, según un anuncio del gobierno de abril. En junio había en el país 4,74 millones de personas en situación de pobreza extrema, según el Ministerio de Asuntos Civiles.
El Día Nacional es una de las fiestas más importantes de China, en la que suele haber viajes y consumo masivos. Pero el desplome del sector inmobiliario y el sombrío mercado laboral han lastrado el gasto, lo que ha llevado a algunos economistas a pedir una intervención fiscal más directa para levantar el ánimo.
Huang Yiping, miembro del comité de política monetaria del Banco Popular de China, instó al gobierno a aumentar el gasto para hacer frente a la debilidad del consumo, en una crítica poco habitual a las políticas económicas chinas a principios de año. Las ayudas en efectivo a los hogares impulsarían el gasto de los consumidores, dijo, mientras que una excesiva atención a la salud fiscal podría obstaculizar la economía.
Ahora que el banco central ha sorprendido al mercado con su amplio paquete de medidas de estímulo monetario, la atención se centra en el Ministerio de Finanzas. En los próximos días podrían llegar más medidas fiscales, ya que el Politburó de Xi, compuesto por 24 miembros, se reunirá antes de la semana de vacaciones.
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