Trazando los 8 caminos hacia la victoria de Harris y Trump en las elecciones de 2024

A menos de 50 días del día de las elecciones, es trillado decir que parece que va a estar reñido. Pero en realidad lo parece. Según el promedio de encuestas de The Washington Post, ni la vicepresidenta Kamala Harris ni el expresidente Donald Trump son claramente favoritos en suficientes estados para llegar a los 270 votos electorales necesarios para ganar la presidencia. Harris va por delante en Pensilvania, Michigan, Wisconsin y Nevada, mientras que Trump lidera en Georgia y Arizona. Carolina del Norte está empatada.

Pero con la ayuda de nuestros promedios de encuestas, hemos identificado cinco caminos probables hacia la Casa Blanca basándonos en la posición de Harris y Trump en las encuestas. También hemos identificado tres caminos menos probables, incluyendo un empate en el colegio electoral. (Estos caminos no son tan probables como los otros cinco, pero aun así merece la pena reconocerlos, dado lo reñidas que están estas elecciones).

Recuerde que estos escenarios se basan en las encuestas actuales, por lo que si se produce un gran movimiento en las encuestas entre hoy y el día de las elecciones, su probabilidad podría cambiar. Nuestros escenarios en están ordenados de mayor a menor probabilidad, pero no hay que darle demasiada importancia. En este momento, es igualmente probable que Harris o Trump ganen la presidencia.

En este momento, Harris está por delante en Wisconsin, Michigan y Pensilvania, según nuestros promedios de encuestas, por lo que este es su camino más directo a la presidencia. El mapa electoral está cambiando, y la importancia de estos estados podría desvanecerse, pero por ahora, estos estados del “muro azul” o “cinturón del óxido” -especialmente Pensilvania- son cruciales para el camino de cualquiera de los candidatos hacia la victoria.

Cómo ocurre esto: Hay dos factores a favor de Harris. En primer lugar, en comparación con el resto del país, los demócratas son más fuertes entre los votantes blancos sin título universitario. Eso es en gran parte gracias a la larga historia de los sindicatos en la región y al hecho de que la religión no es tan importante para estos votantes. Un ejemplo: en 2020, los demócratas perdieron a los votantes blancos sin título universitario por 32 puntos porcentuales en Pensilvania, frente a 47 puntos en Texas.

En segundo lugar, hay una mayor proporción de votantes negros aquí que en otras partes del Medio Oeste (Pensilvania técnicamente no es parte del Medio Oeste, pero es parte del Cinturón del Óxido), y los votantes negros son un electorado central del Partido Demócrata. En 2020, constituyeron aproximadamente el 20% de los votantes de Joe Biden.

Escollos: Apostar toda la presidencia por esta vía sería una jugada arriesgada para los demócratas. Si Harris gana todos los estados no oscilantes que Biden ganó en 2020 y solo estos tres estados del Cinturón del Óxido, la situaría exactamente en 270 votos electorales, el mínimo necesario para ganar. Un paso en falso, incluida la pérdida del 2º distrito electoral de Nebraska, podría costarle la presidencia, pero hablaremos de ello más adelante.

Acabamos de describir cómo Harris podría ganar la presidencia con exactamente 270 votos electorales. Trump también tiene su propio camino a exactamente 270: Pensilvania, Carolina del Norte y Georgia.

Cómo ocurre esto: Las encuestas subrayan cómo este camino podría funcionar para Trump. Él está actualmente por delante en Georgia y aunque Carolina del Norte muestra un empate, es fácil imaginar a Trump ganándolo como lo hizo en 2016 y 2020. El estado que es más complicado en este escenario es Pensilvania, ya que actualmente está por detrás de Harris. Pero nuestro promedio da a Harris solo una pequeña ventaja, y algunas encuestas, incluida la más reciente de The Post sobre el estado, muestran un empate.

Para conseguirlo en , Trump necesitaría hacerlo bien en los suburbios, mejorando sus resultados de 2020. Obtuvo el 49% de los votos frente al 50% de Biden en los condados suburbanos de los siete estados disputados. En las zonas urbanas de estos estados, también tendría que mejorar -o al menos mantener- sus márgenes. Y, por último, tendría que mantener su porcentaje de votos en las zonas rurales de estos estados o seguir aumentándolo, algo que no fue capaz de hacer entre 2016 y 2020.

Escollos: Similar al camino de Harris hacia los 270, es una estrategia arriesgada sin margen de error . Este escenario también podría reducirse a un distrito de la Cámara. En este caso, el 2º Distrito Congresual de Maine, que es oscilante, aunque Trump lo ganó en 2016 y 2020.

Si Harris sigue subiendo en las encuestas, es muy posible que también quede por delante en Arizona y Georgia, lo que le permitiría repetir la victoria de Biden en 2020. Incluso es posible que supere a Biden ganando Carolina del Norte, ya que nuestros promedios de encuestas sugieren que podría ser una carrera incluso más reñida que Georgia.

Cómo sucede esto: El camino de Harris en estos estados es el mismo que el de Trump en el escenario anterior, solo que con diferentes fortalezas en diferentes áreas. Por ejemplo, Harris no necesita aumentar su ventaja en los suburbios; sólo necesita mantener la ventaja de Biden. Sin embargo, sería útil si pudiera aprovechar las ganancias de Biden allí, ya que los suburbios por sí solos no serán suficientes. Harris también tiene que mantener altas sus cifras en las zonas urbanas de estos estados. Como referencia, Biden ganó 61% de los votos en los condados urbanos de estos estados, por lo que Harris tendrá que igualar -o superar- esa cifra. Esto es especialmente cierto en un estado como Georgia, donde la región metropolitana de Atlanta representa una gran parte del voto demócrata total. Y, por último, tiene que asegurarse de que sus cifras en las zonas rurales no bajen demasiado. En 2020, Biden recibió el 38% de los votos en los condados rurales de estos estados.

Escollos: Hay algunas pruebas de que Harris ha perdido terreno entre los votantes negros e hispanos desde 2020. Una encuesta Washington Post-ABC-Ipsos de agosto encontró un apoyo a Harris del 53 por ciento entre los votantes hispanos y del 83 por ciento entre los votantes negros, que es 10 y siete puntos menos, respectivamente, cuando se compara con el informe postelectoral de Catalist. Si Harris está perdiendo apoyo entre los votantes negros e hispanos, su camino hacia la victoria en estos estados podría ser especialmente difícil.

Otro camino hacia la victoria para Trump es a través de los dos estados en los que está actualmente por delante en nuestros promedios: Georgia y Arizona.

Pero a diferencia de los estados en los que Harris va en cabeza, esto no es suficiente para que Trump llegue a 270. Sin embargo, basándonos en su ventaja en estos dos estados del Sun Belt, nuestros promedios de encuestas sugieren que también podría ganar los otros dos estados del Sun Belt. Carolina del Norte está actualmente empatada, y la ventaja de Harris en Nevada es pequeña. Desafortunadamente para Trump, esto todavía no es suficiente para ganar. (Le lleva a 268 votos electorales, suponiendo que gane todos los demás estados no oscilantes que ganó en 2020).

Eso significa que, además de ganar el Cinturón del Sol, Trump necesita ganar uno de los tres estados del Cinturón del Óxido para superar los 270. Cualquiera de los tres estados del Cinturón del Óxido funciona en este escenario, pero basándose en las dos últimas elecciones y en la demografía, Wisconsin puede ser su estado del Cinturón del Óxido más fuerte incluso si, irónicamente, es donde Trump está actualmente peor encuestado.

Cómo ocurrirá: Siempre que Trump mantenga su ventaja en Arizona y Georgia, tiene posibilidades de ganar Nevada y Carolina del Norte. Carolina del Norte ha sido en general un territorio favorable para los republicanos, con pequeñas victorias del partido en las elecciones federales a pesar de las victorias demócratas en algunas elecciones estatales.

Y Nevada se ha decantado hacia los republicanos en las últimas elecciones, aunque los republicanos no han ganado unas elecciones presidenciales desde 2004. Además, Nevada y Arizona son electoralmente similares, con un elevado número de votantes hispanos, por lo que si Trump mantiene su ventaja en Arizona, es muy posible que también gane Nevada.

Ganar un estado del «cinturón del óxido» es un poco más complicado, ya que Trump no está obteniendo tan buenos resultados allí actualmente, pero hay algunos factores demográficos que podrían jugar a su favor en relación con los votantes blancos. Según las encuestas a pie de urna de 2020, ganó el 52% de los votantes blancos en Wisconsin, un estado que perdió por solo 20.000 votos. Así que incluso una pequeña mejora entre los votantes blancos sería suficiente para superarlo. La otra opción serían grandes mejoras entre los votantes negros, pero las encuestas no sugieren actualmente que se esté produciendo un realineamiento de esta magnitud.

Escollos: El camino de Trump a través del Cinturón del Sol no es pan comido. Depende de que Harris no siga ganando terreno allí, como ha hecho desde que entró en la carrera como cabeza de lista.

Pero un problema aún mayor para Trump podría ser ganar un estado del Cinturón del Óxido. Harris tiene una mayor ventaja en las encuestas en estos estados, y una encuesta reciente de la renombrada encuestadora Ann Selzer reveló que Harris perdía Iowa, un estado muy blanco, por sólo cuatro puntos porcentuales. Si esto es cierto, entonces podría ser difícil para Trump hacer las incursiones que necesita con los votantes blancos en un estado como Wisconsin, vecino de Iowa.

Este era el camino más claro de Trump hacia la Casa Blanca hasta que Harris se convirtió en la candidata demócrata. Desde entonces, su mejora en las encuestas le ha dificultado este camino, pero teniendo en cuenta que la ventaja de Harris en estos estados está dentro de un error de sondeo de tamaño normal, Trump aún podría ganar fácilmente por esta vía.

Cómo ocurre esto: Trump ha sido históricamente popular entre los votantes blancos sin títulos universitarios, y Pensilvania, Michigan y Wisconsin tienen más de estos votantes que el promedio nacional. Según las encuestas a pie de urna de 2020, constituían el 45% del electorado en Pensilvania, el 52% en Michigan y el 56% en Wisconsin, frente a sólo el 35% a nivel nacional.

Tampoco haría falta un gran error en las encuestas en estos estados para ponerlos en la columna de Trump. Después de todo, ya ha ocurrido antes. En 2016, Hillary Clinton estaba por delante de Trump en las encuestas en Wisconsin por cinco puntos el día de las elecciones, según FiveThirtyEight, pero Trump terminó ganando el estado por menos de un punto. Y aunque Biden ganó Wisconsin en 2020, lo hizo por menos de un punto porcentual, a pesar de que aventajaba a Trump en ocho puntos en las encuestas el día de las elecciones.

Escollos: Las pocas encuestas posteriores al debate que tenemos apuntan en la dirección de Harris, incluso en estados como Michigan, lo que podría significar que su ventaja en estos estados eventualmente se mueva fuera de un error de sondeo de tamaño normal. Sin embargo, incluso si las encuestas estuvieran equivocadas de nuevo este ciclo, no hay razón para asumir que un error de sondeo favorecería a Trump de nuevo.

Ahora estamos entrando en escenarios menos probables basados en las encuestas actuales, pero las elecciones -especialmente cuando son reñidas como ésta- pueden ser impredecibles. Este es actualmente el camino más difícil para Harris, pero es posible que gane la presidencia ganando sólo el Cinturón del Sol, la inversa del Escenario Uno en el que ganó sólo el Cinturón del Óxido.

Una combinación de Nevada, Arizona, Georgia y Carolina del Norte le daría 275 votos electorales, cinco más de los que necesitaría para ganar. Es importante señalar, sin embargo, que debe ganar en los cuatro estados. Nevada, el más pequeño de ellos, asigna seis votos electorales, por lo que perder it le costaría la mayoría en el colegio electoral.

Cómo ocurriría esto: Si Harris sigue obteniendo buenos resultados en el Cinturón del Sol, es posible que pueda tomar la delantera en estos estados, pero en el escenario en el que su camino más claro hacia la Casa Blanca pasa por el Cinturón del Sol, significa que ha perdido mucho terreno en el Cinturón del Óxido, ya que actualmente es más fuerte allí. Pero como hemos descrito anteriormente, eso podría suceder, dependiendo de cómo cambien las opiniones de los votantes blancos sin título universitario de aquí al día de las elecciones y del grado en que Harris pierda terreno entre los votantes negros en comparación con 2020.

Escollos: Dado el estado actual de las encuestas, este escenario no parece particularmente probable. Pero una pequeña mejora en las encuestas para Harris y un error de sondeo al estilo de 2016 o 2020 bastarían para que esto sucediera .

Similar al escenario anterior para Harris, este es el camino más difícil para Trump. Pero todavía es posible que gane la presidencia ganando el Cinturón del Óxido y un estado del Cinturón del Sol, la inversa del Escenario Dos, en el que gana el Cinturón del Sol y un estado del Cinturón del Óxido.

Una advertencia importante a este escenario: Ese estado del Cinturón del Sol no puede ser Nevada, ya que ganarlo crearía un empate en el colegio electoral. Un punto adicional: Este escenario y el escenario cuatro ilustran por qué Trump tiene un camino ligeramente más complicado para ganar la Casa Blanca. Los tres estados del Rust Belt o los cuatro del Sun Belt no son suficientes por sí solos para que Trump gane la presidencia. Siempre necesita un estado adicional en estos escenarios para superar los 270.

Cómo sucede esto: Como mencionamos en el escenario en el que Trump repite su victoria de 2016, históricamente ha tenido ventaja con los votantes blancos sin título universitario. El hecho, también, de que constituyan una parte desproporcionada del electorado en Pensilvania, Michigan y Wisconsin juega a su favor. Y cuando se tiene en cuenta que actualmente está encuestando por delante de Harris en Arizona, así como en Georgia, no es descabellado ver esto como un camino a la Casa Blanca si rompe el muro azul.

Escollos: Al igual que Harris ganando el Sun Belt, este escenario no parece particularmente probable, dadas las encuestas de hoy. Pero de nuevo, un error en las encuestas similar a los que hemos visto en los dos últimos ciclos podría producir un resultado como este.

Por último, no podemos dejar de mencionar la posibilidad de un empate en el colegio electoral. Es cierto que este escenario es más una obsesión de los frikis de las elecciones -como las convenciones disputadas-, pero dado lo reñidas que están las elecciones, es un escenario para el que deberíamos estar al menos algo preparados.

Hay múltiples maneras en que esto podría suceder, pero los escenarios más relevantes involucran a los dos estados que asignan sus votos electorales de manera diferente: Maine y Nebraska. No son estados en los que el ganador se lo lleva todo, sino que permiten a los candidatos ganar votos electorales individuales si ganan un distrito congresual.

Esto significa que en 2020, Biden ganó en el 2º Distrito Congresual de Nebraska, que contiene Omaha y sus suburbios, incluso cuando Trump ganó el estado por casi 20 puntos. Del mismo modo, en Maine, Trump ganó su 2º Distrito Electoral, más rural, mientras que Biden ganó el estado por nueve puntos. Pero si los republicanos tienen éxito en cambiar la forma en que Nebraska asigna sus votos, este escenario sería aún más probable, porque entonces Harris ganando Pennsylvania, Wisconsin y Michigan nos llevaría directamente a este resultado.

Cómo sucede esto: Si Harris gana Pennsylvania, Michigan y Wisconsin, gana exactamente 270 votos electorales. Pero si pierde el 2º distrito electoral de Nebraska, se produce un empate en el colegio electoral; ambos candidatos tendrían 269 votos electorales, como se ilustra en el mapa anterior. Lo mismo ocurriría si Trump gana Pensilvania, Georgia y Carolina del Norte, pero pierde el 2º distrito electoral de Maine. Pero los distritos del Congreso no son la única forma en que esto sucede. Como describimos en el Escenario Siete, si Trump gana todos los estados del Cinturón del Óxido y Nevada, también acabaríamos con un empate.

Escollos: Ninguno de estos escenarios es particularmente probable. Biden ganó el 2º Distrito de Nebraska por 6,5 puntos en 2020, lo que significa que para que Trump gane el distrito este año, Harris tendría que tener un rendimiento tan malo entre los votantes suburbanos con educación universitaria que es difícil imaginar que se mantuviera en Michigan, Pensilvania o Wisconsin.

A la inversa, Trump ganó el 2º Distrito de Maine por más de siete puntos porcentuales, así que si pierde el distrito este año, tendría que obtener tan malos resultados en las zonas rurales del país que sería sorprendente que se mantuviera en Carolina del Norte, Georgia o Pensilvania.

Pero aunque ninguno de estos escenarios es probable que ocurra, es importante saber que si hubiera un empate en el colegio electoral, la Cámara de Representantes decidiría la elección, y es probable que Trump ganara en esta situación. Los miembros de la Cámara votan por delegación estatal y, según las encuestas actuales, es probable que los republicanos sigan teniendo la mayoría de las delegaciones de la Cámara después de las elecciones.

(*) The Washington Post