Más de 160,000 prestatarios de préstamos estudiantiles están ahora en camino de ver sus saldos cancelados, elevando el monto total de la condonación de deuda permitida bajo las políticas de alivio de la administración Biden a 167 mil millones de dólares, anunció el Departamento de Educación el miércoles.
Con las elecciones a pocos meses, el presidente Biden celebra los logros de su administración al entregar la cancelación de préstamos a casi 4.8 millones de personas a través de una combinación de programas existentes y nuevas políticas. Los republicanos han permanecido firmemente opuestos al esfuerzo, denunciándolo como un desperdicio del dinero de los contribuyentes e inherentemente injusto para los estadounidenses que nunca fueron a la universidad.
“Prometí luchar para asegurar que la educación superior sea un boleto a la clase media”, dijo Biden en un comunicado el miércoles. “Nunca dejaré de trabajar para cancelar la deuda estudiantil, sin importar cuántas veces los funcionarios republicanos elegidos intenten detenernos.”
La mayor parte del nuevo alivio de 7.7 mil millones de dólares irá a 66,900 servidores públicos que se benefician del programa de Perdón de Préstamos por Servicio Público (PSLF, por sus siglas en inglés), que borra los saldos de las personas que pasan 10 años pagando sus préstamos mientras tienen un trabajo en el gobierno o en una organización sin fines de lucro. Al relajar temporalmente las complicadas reglas del programa en 2022, la administración Biden dio a cientos de miles de prestatarios un camino más fácil hacia la condonación de préstamos.
Otros 54,300 prestatarios inscritos en el plan de pago Saving on a Valuable Education (Save) de Biden, que vincula los pagos mensuales de préstamos estudiantiles con los ingresos y el tamaño de la familia, también verán sus saldos eliminados. Los inscritos que pidieron prestado menos de USD 12,000 pueden tener su deuda perdonada después de 10 años de pagos, en comparación con el período de espera tradicional de 20 a 25 años bajo otros planes de pago basados en ingresos.
El alivio de la deuda restante irá a 39,200 prestatarios que han estado pagando sus préstamos por más de 20 o 25 años. Estos prestatarios se benefician de una exención temporal de las reglas que rigen los planes de pago basados en ingresos, conocida como Ajuste de IDR. La exención otorga a los prestatarios de larga data crédito hacia la condonación de préstamos para rectificar las inconsistencias en cómo los servidores de préstamos estudiantiles han tratado y registrado los pagos. Este mes, la administración dijo que daría a los prestatarios con préstamos federales antiguos basados en bancos más tiempo para consolidar y aprovechar el ajuste.
“Uno de cada 10 prestatarios de préstamos estudiantiles federales aprobados para alivio de deuda significa que uno de cada 10 prestatarios ahora tiene un respiro financiero y una carga aliviada”, dijo el Secretario de Educación Miguel Cardona en un comunicado el miércoles.
Las políticas de condonación de préstamos de Biden continúan levantando la ira de los conservadores. Abogados generales republicanos presentaron dos demandas buscando anular el plan de pago Save, acusando a Biden de tratar de proporcionar una cancelación de deuda amplia a pesar del fallo de la Corte Suprema contra una política similar el año pasado. Un grupo de congresistas republicanos el viernes escribió a Cardona instándolo a retirar una regulación pendiente para perdonar algunos o todos los préstamos estudiantiles para más de 30 millones de estadounidenses, calificándolo como una transferencia de riqueza “imprudente”.
Elaine Parker, presidenta de la conservadora Fundación Job Creators Network, dijo el miércoles que la última ronda de cancelación de préstamos también es “ilegal y desafía a la Corte Suprema y al Congreso.”
“Es simplemente un ejercicio de compra de votos”, dijo Parker, cuya fundación fue una de las agrupaciones que demandaron en 2022 para bloquear el plan de Biden de perdonar hasta USD 20,000 en préstamos estudiantiles para algunos prestatarios. “La condonación de deuda estudiantil por parte de los contribuyentes solo exacerba la crisis de préstamos estudiantiles al dar a las universidades un cheque en blanco para seguir cobrando de más a los estudiantes.”
La administración Biden es firme en que la cancelación de préstamos estudiantiles beneficia a la economía en general. Un informe del Consejo de Asesores Económicos publicado en abril encontró que las cancelaciones de préstamos estudiantiles y otras acciones tomadas por la administración podrían impulsar el consumo a corto plazo, la propiedad de viviendas y el emprendimiento.
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