La princesa noruega Martha Louise puso fecha a su boda con el “chamán” estadounidense Durek Verrett

La princesa de Noruega ha fijado una fecha para casarse con el estadounidense Durek Verrett, un autodenominado “chamán” que ha levantado ampollas en el país con polémicas afirmaciones. Entre otras cosas, ha rechazado los tratamientos convencionales contra el cáncer y ha afirmado que predijo la pandemia de coronavirus.

La princesa Martha Louise, cuarta en la línea de sucesión al trono, conmocionó a la nación de 5 millones de habitantes cuando anunció el año pasado que abandonaría la mayor parte de sus obligaciones reales para centrarse en su propio trabajo de medicina alternativa con Verrett. La pareja se casará en agosto en el país escandinavo.

En un posteo de Instagram que compartieron el miércoles, la princesa y su pretendiente estadounidense aparecían en una fotografía vestidos en tonos rosas y blancos, con el brazo de ella sobre el hombro de él. “Te quiero, cariño. Tan feliz de recorrer el camino de la vida contigo”, escribió la princesa en un comentario. “Te quiero, cariño. Lo eres todo para mí”, respondió Verrett en su página.

Martha es la hija mayor del rey Harald V de Noruega y su única hija. El trono lo heredará su hermano menor, el príncipe heredero Haakon. Una enmienda constitucional de 1990 permite que el hijo mayor herede el trono en Noruega, independientemente de su sexo.

Martha, de 51 años, y Verrett, de 48, causaron un gran revuelo cuando anunciaron su compromiso en junio del año pasado. Algunas de las afirmaciones más dudosas de Verrett han sido objeto de intenso escrutinio en Noruega. Ha sugerido que el cáncer puede afectar a las personas infelices y ha afirmado haber previsto un “apagón” mundial a principios de 2020, relacionado con la pandemia del coronavirus. También ha afirmado que tener demasiadas parejas sexuales deja en las mujeres “huellas” que deben limpiarse.

En su sitio web oficial, Verrett se describe a sí mismo como “chamán de sexta generación”, “visionario” y autor de best-sellers. El californiano también dirige una “Escuela de chamanes” y “Wokeshops” en línea que permiten a los participantes “aprovechar su poder personal, mientras desbloquean patrones negativos que les impiden alcanzar su rendimiento humano óptimo”. Su página web afirma que sus enseñanzas “han impactado a miles” y nombra a figuras públicas como las actrices Nina Dobrev y Gwyneth Paltrow.

Tras su compromiso, el palacio dijo en un comunicado que Martha renunciaría a la mayoría de los deberes reales. “La Princesa da este paso para crear una línea divisoria más clara entre sus actividades empresariales y su papel como miembro de la familia real”, se afirma en el comunicado.

Aunque su padre, el rey, permitió a la princesa conservar su título, el comunicado añadía que cuando la pareja se case, “de acuerdo con la tradición [Verrett] no tendrá título ni representará a la Casa Real de Noruega.” Aun así, “pasará a formar parte de la familia real”, como han hecho otros, añadía el comunicado.

Esta semana, un breve comunicado de palacio felicitaba a la pareja.

“La Reina y yo estamos encantados de que la princesa Martha Louise y Durek Verrett hayan anunciado sus planes de boda”, dijo Harald en el comunicado. “Estamos encantados de incluir a Durek Verrett en nuestra familia y esperamos celebrar el gran día con ellos. Les deseamos lo mejor a Martha y Durek”.

La decisión sigue a otras historias en otros lugares de amor moderno que sacuden tradiciones reales centenarias. El príncipe Harry y la duquesa Meghan de Sussex, en Gran Bretaña, optaron por “retirarse” de sus obligaciones reales en 2020 antes de trasladarse a Estados Unidos.

También en Japón, la princesa Mako se enamoró de Kei Komuro, un plebeyo, y se enfrentó a una intensa presión pública para renunciar a su título imperial y casarse con su amor de la universidad.

El palacio noruego ha condenado lo que calificó de “actitudes racistas” hacia Verrett, que es afroamericano, añadiendo que “consideran un punto fuerte que la Casa Real refleje la diversidad étnica de Noruega”.

La princesa dijo esta semana que su boda tendría lugar en el Hotel Union de Geiranger el 31 de agosto.

Describió esta zona del oeste de Noruega como un lugar con “fiordos y montañas espectaculares” que “representa la riqueza cultural y la belleza natural de Noruega”. La mayoría de los miembros de la realeza se han casado tradicionalmente en la catedral de Oslo.

“Martha y yo estamos muy contentos de celebrar nuestro amor en el bello entorno de Geiranger... en un lugar tan rico en historia noruega”, escribió Verrett en Internet. “Geiranger es el lugar perfecto para abrazar nuestro amor”.

Martha estuvo casada anteriormente con el escritor Ari Behn, con quien tuvo tres hijas. Se divorciaron en 2017 y él murió en 2019.

Al anunciar su compromiso con Verrett, Martha dijo: “Hace que mi corazón salte (...) me ve y me reconoce desde mi máximo potencial”.

© The Washington Post 2023