Manuela, una joven argentina, viajó a Londres durante tres meses de intercambio para estudiar inglés. A lo largo de su estancia, compartió diversas anécdotas en sus redes sociales, pero una historia en particular dejó sin palabras a sus seguidores.
Durante su tiempo en Europa, Manuela se hizo amiga de Valen, una joven brasileña. Juntas, vivieron una experiencia que recordarán por siempre. “Hoy les traigo la historia de cómo, por ser una rata, me terminé comprando un pasaje equivocado”, comenzó Manuela en su relato. La historia se remonta a marzo de 2023, cuando las dos amigas estaban explorando ofertas de viajes en internet. Un día, encontraron un pasaje a Italia por solo 20 libras. “Nuestra idea era llegar a Pescara, que era donde habíamos comprado el vuelo, y tomarnos un tren o un bondi que nos lleve a Roma. Pensamos que en dos horitas lo resolvíamos y a las doce del mediodía estábamos sacándonos una selfie en el Coliseo”, relató la joven con humor.
Sin embargo, las cosas no salieron como esperaban. Al llegar a Pescara, se dieron cuenta de que el lugar no era como lo habían imaginado. “Volamos con nuestra mochilita llena de sueños. Llegamos a las 10:30 y el aeropuerto era muy chiquito. Era como de los años 60. A todo esto no había ningún turista”, subrayó Manuela, quien destacó lo desconcertadas que quedaron al ver que eran las únicas extranjeras en el lugar.
La policía local, sorprendida por la llegada de las chicas en pleno invierno, les hizo un interrogatorio para averiguar qué hacían allí. Las estudiantes explicaron la oferta que habían conseguido y, tras verificar su historia, las dejaron pasar. Una vez fuera del aeropuerto, se dieron cuenta de que no había micros a Roma en ese horario y que debían tomar un tren que tardaba 7 horas. “Nos dimos cuenta que Pescara quedaba en la otra punta del país”, comentó Manuela.
Decididas a continuar su aventura, compraron los tickets de tren. Pero el tren se rompió varias veces y tuvieron que retomar su viaje en un micro. Finalmente, luego de 9 largas horas, llegaron a Roma. Pasaron un fin de semana fantástico, tal como lo habían soñado, pero se enfrentaron a un nuevo desafío: la vuelta a Pescara, de donde salía su avión de regreso a Inglaterra.
Para evitar otro viaje complicado, decidieron alquilar un auto y conducir hasta Pescara. Sin embargo, no se percataron, hasta que se subieron al avión, que les habían hecho una multa de 70 euros por no pagar el peaje. “Fue la multa más cara de mi vida, no lo quiero ni convertir”, contó Manuela con resignación.
Esta aventura, llena de imprevistos y desafíos, será sin duda una historia que Manuela y Valen recordarán por el resto de sus vidas. “Así concluye este fin de semana caótico pero divertidísimo en Italia”, finalizó la chica.
El posteo tuvo más de 170 mil reproducciones y superó los 17 mil likes. “Te empiezo a seguir porque siento que hasta ir a comprar pan tenés alguna anécdota”, “Amo los chistecitos que tiras en medio del relato jaja”, “Cuándo es así no tenés que pagar nada. Las deudas prescritas a los 2 años en Italia... a lo sumo si venia un consumo en tu tarjeta lo desconocés”, “Amo porque en ningún momento se perdieron las risas”, “No, no lo que me meto en tus historias que hasta me voy imaginando las secuencias”, “Sos de mis personas favoritas en este mundo realmente”, fueron algunos de los comentarios de los usuarios de la plataforma.