Guillermina acaba de comenzar primer grado. Esta niña, que conquistó el corazón de los usuarios de las redes sociales con su historia de vida junto a su padre, Ernesto, arranca un nuevo ciclo en su etapa escolar y los seguidores de esta pequeña pero inmensa familia están ansiosos por seguir el proceso de cerca.
Hace poco más de tres años, la vida de ambos dio un vuelco que transformó su cotidianidad. Betina, la madre de Guille, falleció luego de luchar contra un cáncer de mama y, a partir de ahí, ambos trabajaron juntos arduamente para salir adelante.
El 1° de junio de 2020, en medio de la pandemia de COVID-19, Ernesto Raffo, quien acaba de cumplir 41 años, de repente, se encontró solo con una niña y la misión de convertirse en padre y madre a la vez. “Yo era padre hacía dos o tres años y estaba aprendiendo a serlo, a lidiar con la enfermedad de Betina y de golpe me encontré solo con ella”.
De a poco, el hombre que trabajaba como comerciante, empezó una vida diferente de la que había planeado. El horario que acostumbraba a dedicarle al trabajo no rendía, ya que Guille iba al jardín y él debía recogerla porque no contaba con los fondos para contratar una niñera.
La vida de ambos se modificó. Ernesto se propuso grabar lo que estaba viviendo con su hija, sin pensar que, poco a poco, la repercusión de sus videos en TikTok e Instagram escalarían a un nivel insospechado.
De papá a influencer
“Cuando sucede lo de Betina, yo sabía que no había retorno, estaba muy angustiado, y dije: ‘todo lo que estoy pasando lo voy a tener que contar’, como terapia, para que le sirva a otro también”, explicó Ernesto Raffo a Infobae. Y agregó: “Mi mayor miedo era cómo iba a llevar adelante esta crianza solo”. Sus dos hermanos nunca dudaron de que él iba a poder con eso y, a pesar del temor inicial, decidió documentar su nueva vida.
“Un día estaba acostado y sentí la necesidad de contar estos miedos del qué dirán de un tipo criando a su nena solo”, así comenzó todo, con un video en Instagram en julio de 2022. Luego siguieron clips de su rutina diaria con Guille y hoy cuenta con 290 mil seguidores solo en TikTok.
Justamente en la plataforma de videos cortos, donde se convirtió en todo un influencer, uno de sus videos en los que Guille, que hoy tiene 6 años, le pedía conocer la casa en la que vivió su mamá, algo que finalmente concretaron, se hizo tan viral que miles de personas comenzaron a escribirle, un poco para darle ánimo en su lucha diaria y otro poco para pedirle algún consejo de cómo enfrentar una pérdida.
“Es una relación hermosa la que tenemos nosotros dos. Guille es mi pequeña gran maestra”, dice orgulloso. Además aclara que en los videos no sólo comenzó a hablar sobre la viudez sino que se convirtió en un referente de familia monoparental.
Sin embargo, no todo siempre es felicidad. Hay veces que Ernesto está sin fuerzas. “Cuando uno se va de vacaciones y si está cansado se turna con la otra persona para cuidarlo o lo hacen entre los dos pero cuando es una familia monoparental, no hay escapatoria, y puede pasar que uno se enoja con el chico y más de una vez Guille me dice: ‘¿Y por qué te enojás conmigo?’ y es verdad pero es uno que no da más. A mí todavía me cuesta un poco poner límites. Ella me guía un montón”.
Guillermina terminó el preescolar y arranca primer grado con toda la emoción a cuestas. Los fines de semana que va a la casa de su abuela, Ernesto aprovecha para descansar. Es feliz quedándose en su casa sin hacer nada. “Pero Guille me llama: ‘¿qué estás haciendo papá?’ y yo digo: ‘pará un poco, tenés 6 años y ya me estás controlando’”, cuenta divertido.
¿Cómo mantiene vivo el recuerdo de Betina? Si bien era muy chica cuando su madre falleció tanto él como su abuela se encargan de contarle historias sobre ella. “Guardé la ropa de Betina de las fotos importantes que están juntas para que la vea, si quiere. Qué pueda saber que esa ropa que usaba con ella cuando era bebé la tiene acá. Nosotros planteamos que la madre no está pero desde lo natural. Yo no quiero que la nena crezca con miedos”, destaca.
En los últimos días, esta familia compartió un video que también escaló en las redes. Allí, en el colegio donde inicia las clases, le pedían una foto familiar. “Seguramente es para aprender a nombrar a cada integrante de la familia”, explica. Guille quería llevar una foto en la que estaban los tres: ella con dos años, su padre y Betina. Ernesto le explicó amorosamente que eso estaba muy bien pero que la familia ahora eran ellos dos, porque allí se la veía muy chiquita y no como era en la actualidad. Así que juntos decidieron incorporar ambas imágenes. Ese video también se hizo viral.
La niña ama que su padre sea influencer o como él dice “creador de contenidos”. Acaban de llegar de unos días en Mar de las Pampas y, muchas veces en la calle los pararon para sacarse fotos; los reconocen ya que los dos son figuras en las redes sociales. Si bien asegura que el 95% de las personas que le escriben son mujeres, hay algunos hombres que también le piden consejos. “Me emociono porque a veces me dicen ‘mi papá fue así conmigo’”, comenta quien se toma el trabajo todas las noches de agradecer cada comentario.
Ernesto comienza su día bien temprano cuando, a las 6 de la mañana, se levanta para preparar la vianda y se va a trabajar (aún lo hace por su cuenta) y a las 4 de la tarde corta su actividad para buscar a Guillermina, que sale de la escuela. Hasta ahora estaba en la colonia pero, como asiste a un colegio bilingüe, las clases arrancan el 14 de febrero. Nada mejor que celebrar San Valentín yendo a buscarla luego de su primer día para merendar juntos. Porque esto también es parte del amor, probablemente la parte más importante.