Las diferencias culturales entre países a menudo se manifiestan en los detalles más simples de la vida cotidiana. Elementos aparentemente triviales, como la forma de utilizar objetos comunes o la percepción de ciertos hábitos, reflejan las peculiaridades que definen las identidades culturales. Es en estas sutilezas donde se descubre cómo la diversidad de perspectivas se entrelaza con la vida diaria, dando forma a las prácticas y actitudes que distinguen a las naciones. En este contexto, una pareja describió las cualidades más representativas de los latinos y la diferencia con otros países.
Sam, originaria de Estados Unidos, y Hernán, argentino, se convirtieron en furor de TikTok al compartir consejos sobre su vida cotidiana. Sus videos, que exploran las diferencias culturales entre ambos, lograron conquistar las redes sociales. Sin embargo, su último video alcanzó niveles de viralidad sorprendentes al abordar un tema que resuena en los corazones latinos: los objetos difíciles de desechar.
En el video, Hernán presenta de manera humorística una lista de objetos que, según ellos, los latinos encuentran difícil tirar a la basura. Entre los destacados se encuentran los envases de manteca, esos recipientes versátiles que se reutilizan para almacenar desde restos de comida hasta artículos de escritorio. La conexión emocional con estos envases hace que muchos se resisten a desprenderse de ellos.
Las botellitas de plástico de gaseosas, aguas saborizadas o simplemente agua, también figuran en la lista. La costumbre de llenar la heladera con estas pequeñas botellas “por las dudas” crea un dilema al momento de deshacerse de ellas, generando acumulación en los hogares latinos.
Otro objeto mencionado son los sobrecitos de aderezos como mayonesa, mostaza o ketchup que se obtienen en los restaurantes de comidas rápidas. La idea de guardarlos en algún cajón “por si acaso” es una práctica común, llevando a que estos paquetitos queden olvidados durante años y luego se descarten porque vencieron.
El broche final de la lista lo pone el humilde pañuelo de papel. La percepción de que aún pueden tener uno o dos usos más antes de ser descartados hace que muchos los guarden en los bolsillos, como confiesa una seguidora que menciona encontrar pedacitos de pañuelos de papel en su lavarropas.
El video, titulado “Reciclaje nivel 100″, desencadenó un fenómeno en las redes, acumulando 2,8 millones de reproducciones, más de 270 mil “me gusta” y alrededor de dos mil comentarios. Los usuarios, muchos de ellos provenientes de Argentina, aceptaron con humor y complicidad la relación especial que tienen con estos objetos.
“No, los aderezos van en la puerta de la heladera”, “Los argentinos somos recicladores seriales”, “Y los frascos de mermelada también se guardan”, “Al final somos más ecológicos de lo que creíamos jaja”, “La bolsa madre que contiene otras bolsas”, “Todo lo que hizo es perfectamente normal. No ví nada raro”, “Somos los reyes del reciclaje”, fueron algunos de los comentarios del los usuarios.