En el mundo de la gastronomía, los horarios laborales suelen ser extensos y los días libres, un lujo difícil de conseguir. La cuenta española de Twitter, conocida como Soy Camarero, dedicada a revelar las historias más insólitas del sector, desató una nueva polémica al exponer una conversación de WhatsApp entre un aspirante a mozo y el encargado de un restaurante.
El diálogo, publicado con la descripción en tono de ironía: “¿Día libre entero? ¿Eso qué es, se come?”, reveló las extremas condiciones laborales que algunos trabajadores del sector deben enfrentar. Si bien la charla se inició con la clásica pregunta sobre la experiencia del futuro camarero del lugar, cuando se pasó a hablar sobre el horario de trabajo, todo cambió.
El aspirante, ansioso por conocer las condiciones del empleo, preguntó al empresario sobre la cantidad de horas y cómo serían las jornadas laborales. Este le respondió que el trabajo incluía un turno matutino, de 11:30 a 16:30 horas, y un turno vespertino, de 19:30 a 23:30 horas. Un horario partido que suele agotar a cualquier empleado.
Sin embargo, lo que más sorprendió al aspirante fue la respuesta cuando quiso conocer los días de franco. “¿Días de fiesta?” inquirió. La respuesta del jefe fue desconcertante: “domingo por la noche y miércoles por la noche”. En otras palabras, no habría días completos de descanso en la semana, ya que el mozo tendría que trabajar en turnos partidos todos los días, sin la posibilidad de disfrutar de un día de descanso completo.
La indignación en las redes sociales no se hizo esperar. Muchos usuarios expresaron su repudio ante estas condiciones laborales extremas y la aparente explotación de los trabajadores en el sector de la gastronomía.
“¿La ley y los derechos laborables deben ser los padres para esta gentuza, no?”, “A mi intentaron colármela en un hotel diciendo que como el día anterior se trabajaba de mañana y al día siguiente era turno de tarde ahí estaba mi día libre”, “Para qué quieres un día entero de fiesta, ¿para gastarte el sueldo que no cobras?”, “El problema también está en que estamos permitiendo estas cosas”, “Doy gracias por no trabajar en él pero entristece ver que no avanzamos como sociedad. Seguimos queriendo la esclavitud”, fueron algunos de los comentarios en la publicación.