Las elecciones generales toman la escena nacional y, como es tradición, no faltan las curiosidades y perlitas que marcan cada jornada electoral. Desde una novia que acudió a votar inmediatamente después de su boda hasta un verdadero “Iron Man” en Luján, este domingo no se queda atrás en términos de singularidad.
En primer lugar, la sorpresa matutina la dio Gustavo Loiacono que se robó el protagonismo en las primeras horas de votación. Personalizado como “Iron Man”, el famoso superhéroe de los “Avengers”, llegó temprano a una escuela de Luján y dejó boquiabiertos a los votantes y autoridades electorales. Su elección de vestuario estuvo a punto de otorgarle el título de autoridad de mesa, pero finalmente se limitó a emitir su voto de manera tan peculiar como su atuendo.
Por su parte, en la escuela San Francisco de Asís, en Llavallol, otro votante optó por rendir homenaje a un dibujo animado de la infancia. Vestido como “Bananas en Pijamas”, este peculiar votante demostró que en las elecciones, la creatividad y la diversión también son bienvenidas.
En San Martín, Mendoza, la novia Viviana Rosa Olivari se convirtió en un ejemplo cívico. Inmediatamente después de su fiesta de casamiento, Olivari llegó temprano a la escuela San Vicente de Paul para ejercer su derecho al voto. Sin duda, un gesto que demuestra su compromiso con la democracia en un día tan especial.
En tanto, Jorge Williams, el famoso sastre conocido por su traje patriótico, cumplió con su deber cívico en la Escuela Lenguas Vivas. A sus 81 años, no solo dejó su voto en la urna, sino que también lo hizo luciendo su característico atuendo de la bandera argentina, una tradición que no pasa desapercibida en cada elección.
Por último, un votante se presentó en un centro de votación con una inusual máscara de motosierra, captando la atención de las redes sociales. Sin embargo, su elección de atuendo no pasó desapercibida para las autoridades electorales, y su voto fue anulado. De manera indirecta, este votante hizo patente su preferencia por el candidato Javier Milei en plena veda electoral.