En las últimas horas, una cervecería de La Coruña, España, se convirtió en el centro de atención después de que una cliente publicara una reseña negativa en Google, que incluía comentarios racistas y discriminatorios hacia una de las mozas. Sin embargo, la respuesta del restaurante generó un amplio apoyo público y una oleada de críticas positivas.
En su reseña, la clienta expresó su insatisfacción con el servicio de la Cervecería O’ Barullo, calificándolo de “trato pésimo” y acusando a una de sus camareras, a la que señaló como “sudamericana y de pelo corto” de ser “déspota y maleducada”, entre otros calificativos. Además, sugirió que deberían despedirla, alegando que “si no le gusta su trabajo, que lo deje”. Estos comentarios no pasaron desapercibidos y generaron indignación.
Los dueños del lugar respondieron con firmeza, denunciando la reseña como un “ataque personal y de racismo” en lugar de una queja legítima. Contradijeron la afirmación de que la clienta había sido ignorada, asegurando que había sido atendida y que además se marchó sin pagar lo que consumió. En un gesto de apoyo a su empleada, afirmaron: “No se despide a nadie por ser latinoamericana”.
El conflicto volvió a escalar cuando la reseña y la respuesta del restaurante se difundieron en las redes sociales a través de la popular cuenta de “Soy Camarero”. La publicación atrajo la atención de miles de usuarios y generó un intenso debate en la plataforma sobre la tolerancia y la discriminación en el ámbito de la gastronomía.
Como muestra de solidaridad, numerosos usuarios comenzaron a dejar críticas positivas en Google para la Cervecería O’ Barullo. Uno de ellos elogió el lugar como “acogedor” y destacó el “servicio excelente”, alabando al personal y, en particular, a la camarera de pelo corto de origen caribeño como “un amor”. El apoyo abrumador a la cervecería y su personal dejó en claro que la intolerancia y la discriminación no deben tener cabida.
“Encima se fue sin pagar el cabrón”, “La reseña muestra la clase de educación de la clienta; demasiado exquisitos han sido con la respuesta. Deberían denunciar por marcharse sin pagar y por xenofobia”, “Creo que no le gustó el corte de pelo, igual quería una camarera con melena”, “Cuando leo este tipo de reseñas de ataques directos hacia una etnia específica me da inseguridad por mi futuro como inmigrante porque sé que me pasará algún día”, fueron algunos de los comentarios que dejaron en la publicación.