Un hombre se hizo pasar por Dios y estafó por 300.000 euros a una mujer: le prometió una casa en el cielo

La manipulación de un vecino astuto, que se hizo pasar por entidades divinas, llevó a una anciana a perder todos sus ahorros. Ahora, enfrenta el juicio, en búsqueda de justicia para la víctima

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La estafa de un hombre
La estafa de un hombre haciéndose pasar por Dios deja a una mujer de avanzada edad en ruinas económicas. (YouTube)

Un vecino sin escrúpulos se hizo pasar por Dios para estafar a una mujer de avanzada edad durante cinco años. Aprovechando su vulnerabilidad y estado mental frágil, convenció a la víctima de depositar grandes sumas de dinero en un cajón de su tienda de tratamientos naturales, al que llamaba “el banco del cielo”, y le prometió intereses astronómicos y la construcción de una casa en el paraíso junto a sus seres queridos fallecidos.

Sin embargo, la promesa celestial resultó ser una trampa y la mujer entregó todos sus ahorros, incluso llegó a pedir créditos para satisfacer las demandas del falso mesías.

El caso llegó a la Audiencia Provincial de León, en España, y la Fiscalía solicitó una condena de ocho años de prisión para el acusado de estafar a la indefensa mujer de avanzada edad con una cifra que supera los 250.000 euros. Se cree que el hombre se aprovechó de su fragilidad mental para manipularla y obtener dinero ilícitamente.

La víctima de la estafa
La víctima de la estafa dio declaraciones ante la prensa local. (Captura YouTube)

Bajo el pretexto de ser elegida divina, la mujer relató una historia macabra que involucraba un mensaje escrito con sangre en el espejo de su baño. Según ella, la Virgen se le apareció, afirmando que era santa y exigiendo que borrara el mensaje con una esponja. Aunque es consciente de que ha sido víctima de una estafa, la mujer sigue creyendo en su supuesta santidad.

Durante el juicio, se presentó una grabación en la que se escucha al acusado utilizando diferentes voces para intimidar a la mujer y amenazarla con consecuencias terribles si revelaba el engaño.

El dinero estafado no fue recuperado. No obstante, el acusado cerró su negocio, admitiendo que estaba endeudado, justo después de que se presentara la denuncia y se interrumpieran los depósitos de la víctima.

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